Con el pitazo final de Patricio Loustau, los canallas comenzaron a celebrar el triunfo sobre su clásico rival. El Monumento a la Bandera y el Gigante de Arroyito se transformaron en los epicentros de la alegría auriazul.
Con el pitazo final de Patricio Loustau, los canallas comenzaron a celebrar el triunfo sobre su clásico rival. El Monumento a la Bandera y el Gigante de Arroyito se transformaron en los epicentros de la alegría auriazul.
Banderas, paraguas, camisetas y gorros con el azul y amarillo comenzaron a replicarse en pocos minutos en inmediaciones a Génova y Avellaneda, una de las esquinas emblemáticas del Gigante de Arroyito. Chicos, jóvenes y adultos de distintas edades cantaban y saltaban a rabiar tras la victoria de Central, que con gol de Franco Niell derrotó por 1 a 0 a Newell's en el Coloso.
Mientras tanto el Monumento se convirtió en pocos minutos en el escenario principal de los festejos. Familias enteras de canallas dieron en presente en la explanada sobre avenida Belgrano. Algunos hasta llevaron hasta a la mascotas debidamente lookeadas con los colores del conjunto de Arroyito.