No cargan con la mochila de la responsabilidad. Ni nada que se le parezca. Pero si son la apuesta de Raggio para intentar salir a flote. Hoy los pibes Facundo Bustamante e Iván Silva asoman como el golpe de timón que hizo el entrenador de Newell’s para intentar enderezar el rumbo y hacer olvidar una seguidilla de resultados dolorosos. Estos jóvenes mediocampistas, que son viejos conocidos de Carozo, hicieron sus primeras armas en primera división en el angustioso empate ante Godoy Cruz y asoman como titulares para el trascendental duelo del lunes frente a San Lorenzo.
La magnitud de la elección de Raggio radica en que atraviesa un momento bisagra. Porque su continuidad pende de un hilo. Mejor dicho de un resultado. La victoria le dará el crédito que lo mantendrá en el cargo, mientras que la de rota le pondrá punto final a su ciclo. En caso de un empate, dependerá de cómo sea el desarrollo del partido. Ese es el panorama de cara al duelo del lunes ante San Lorenzo. El mismo que existía en la previa del duelo ante Defensa y Justicia que finalmente fue suspendido por las inclemencias climáticas.
Está demasiado claro que el técnico está dispuesto a morir con la suya. Y eso es una cabal demostración de convicción y carácter. Se la juega por dos pibes a los que conoce prácticamente de memoria, ya que a ambos los dirigió durante varios pasajes de sus pasos por las divisiones inferiores.
Quien más cantidad de partidos disputó bajo el ala de Raggio fue Bustamante, con 52. Incluso lo hizo debutar en inferiores de AFA en 8ª división en 2010, cuando el rojinegro perdió la semifinal frente a River.
Su gran año en inferiores fue en 2013, cuando integró la 5ª división leprosa que se quedó con el título. Durante esa campaña el volante marcó 10 goles en 28 partidos.
La decena de tantos incluye el 1-0 con el que su equipo se impuso en el clásico. Y repitió esa suerte de proeza este año jugando para la 4ª categoría del club.
La estadística marca que su paso por reserva comenzó de la mano de Ricardo Lunari como visitante en un 3-0 ante Estudiantes. El mismo se extendió a lo largo de 11 partidos (siete como titular) y dos goles: Olimpo (L) 3-0 y Banfield (L) 1-2.
Para hacer su presentación en primera primero frente al Tomba, primero tuvo que permanecer durante tres partidos en el banco de los suplentes (ante Quilmes, River y Central).
La historia de Silva con la casaca rojinegra arrancó en 2008, cuando debutó en 9ª división ante Almirante Brown. Su primer contacto con Raggio se dio un año más tarde en 8ª y se repitió en 2011 y 2012, cuando Carozo estaba a cargo de la 5ª. Durante el primer año Bustamente jugó en esa división pese a que tenía edad para desempeñarse en una categoría menor.
Su desembarco a la reserva rojinegra se dio este año, también con Lunari, con cuatro presentaciones y dos goles. Antes de dar el salto a primera fue conducido por Ricargo Johansen, con un palmares de cuatro partidos y un gol.