Asistió en el primero. Hizo el segundo. Y con un taco sutil inició la jugada en el tercero. Sí. Marcelo Larrondo fue protagonista en la victoria de Central ante Godoy Cruz. Porque inscribió su nombre en los tres goles. Y también el arquero Rodrigo Rey le sacó un disparo de manera espectacular que buscaba la red. “Me pone muy contento dar el máximo, esta vez las cosas salieron como quería, por ahí no lo logré en el clásico, pero uno siempre tiene cosas para seguir mejorando, y eso se hace posible cuando jugás con compañeros al lado como Marco, Lo Celso, Montoya y los demás. Lo importante es el equipo, por eso es primordial que al que le toque jugar pueda hacerlo de la mejor manera, sabiendo de antemano que no todos los partidos son iguales, pero siempre uno entrena para mejorar”, dice con simpleza el delantero mendocino.
— ¿Resultó más simple de lo que imaginaban?
—Son todas finales ahora y hay que encararlas con esa mentalidad. Sabíamos que este partido en Mendoza había que ganarlo y por suerte se logró. Ahora vamos a San Juan con la misma idea.
—Desde lo individual también tuviste un gran partido...
—Estoy muy contento por mi rendimiento, uno en cada partido trata de hacer lo mejor, de aportar lo de uno al equipo. Esta vez se consiguió rápido por suerte.
—¿Por qué?
—Sabíamos cómo juega Godoy Cruz y trabajamos en la previa para forzar los errores de ellos, porque sabíamos que es un equipo que trata de salir jugando desde el fondo, entonces fuimos a presionarlos para tratar de capturar la pelota en su terreno y lo conseguimos y estuvimos certeros en la definición, así que rápido logramos hacer la diferencia en el resultado. Eso nos dio tranquilidad para transitar el partido bien ordenados, tal cual lo preparamos.
—¿En el complemento la diferencia lograda los hizo disminuir la intensidad?
—No, la ventaja nos dio serenidad pero no nos relajó, seguimos con la misma idea, además ellos lograron descontar y eso mantuvo la exigencia hasta el final. En Estudiantes pensamos ahora, pero no durante el partido con Godoy Cruz, porque los tres puntos eran muy importantes y por eso había que asegurarlos.
—Articularon muy bien con Ruben y Lo Celso, y eso fue determinante en el partido. ¿Cómo se le da continuidad a ese entendimiento?
—Sí, logramos sincronizar bien con Marco y Giovanni, nos buscamos siempre y conseguimos varias jugadas decisivas. La verdad es que la entrada de Giovanni le vino muy bien al equipo. La idea es seguir trabajando pa-
ra lograrlo, pero no siempre es posible.
—¿El tiempo de adaptación a Central es el que te imaginabas?
—Yo lo dije, venía con muchísimas ganas de aportar lo mío a Central y este equipo te facilita cualquier adaptación, y en lo personal me siento muy contento porque le estoy siendo útil al conjunto. Mi mentalidad también es la de insistir siempre.
—¿Cuánto ayuda ganar para disimular el cansancio?
—Ganar se transforma siempre en un envión anímico para disimular el esfuerzo, porque te fortalece tanto en lo individual como en lo colectivo, y si bien tenemos pocos días de recuperación y sabemos que vamos a enfrentar por la Copa Argentina a un equipo duro, estamos convencidos de que podemos seguir avanzando.