No sólo fútbol se vivió en el Mundial. Como el peor de los goles en contra, en el certamen de Rusia se registraron múltiples casos de violencia machista. Así lo aseguraron desde la Fifa, pero además lo ratificaron periodistas deportivas de Brasil y también expertos en la lucha contra la discriminación. Es más, con cierta sorpresa se contaron más casos de sexismo que de racismo.
"Hubo 30 casos de sexismo en las calles" atribuidos a aficionados, dijo el director de la organización Fútbol contra el Racismo en Europa (Fare, por sus siglas en inglés), Piara Powar. Pero la Fifa subió la apuesta. Habló de 45 casos y confirmó que 15 de ellos afectaron a mujeres periodistas.
Las profesionales brasileñas de la comunicación no se callaron y en el marco de la campaña para frenar el acoso que sufren cotidianamente mientras ejercen su profesión, y pusieron en evidencia grabaciones en las que los aficionados las tocaban, besaban o intentaban besar durante el Mundial. Y continuaron con la campaña #DeixaElaTrabalhar (#DéjalaTrabajar) que vienen desarrollando desde hace meses.
En la antesala del Mundial algunas organizaciones habían advertido sobre posibles casos de racismo de hinchas rusos y europeos que incurren históricamente en actos de intolerancia. La Fifa impuso duras sanciones a federaciones como México, Serbia, Rusia y Polonia por expresiones homofóbicas, racistas, nacionalistas u ofensivas en los estadios. Pero no superaron los acosos sexistas.
A tono con las luchas de género del colectivo #Ni una menos o de las mujeres de Hollywood nucleadas en el #MeToo, las periodistas brasileñas no sólo denunciaron abusos durante la Copa sino que continuaron con la campaña contra la sexualización laboral que iniciaron 50 de ellas hace meses en su país y a través de un video.
Durante el Mundial hubo un caso testigo: el de la movilera de TV Globo y SporTV de Brasil, Julia Guimares, quien mientras hablaba en vivo fue abordada por un hombre que quiso besarla sin su consentimiento. Guimaraes le dijo en inglés: "Esto no es educado. Esto no está bien. No lo haga nunca más. Nunca le haga esto a una mujer, ¿de acuerdo?", mientras de fondo pudo escucharse al hombre pidiendo disculpas.
#DéjalaTrabajar se volvió viral luego que Bruna Dealtry, una conductora del canal deportivo Esporte Interativo, subió imágenes a Facebook cuando un fan de Vasco de Gama intentó besarla en la boca. Hasta ahora el video se vio más de 1,5 millones de veces.
Otra periodista, Monique Danello, aseguró que cubrir el Mundial es el sueño para un periodista deportivo, pero que cuando se es mujer "el freno es el machismo, porque a través de insultos y acosos se pone en peligro el ambiente laboral".
Las periodistas sostienen que durante años fueron manoseadas, besadas e insultadas cuando cubrían partidos y ruedas de prensa mientras las autoridades no hacían nada. Y en su reclamo sostienen: "Somos mujeres y profesionales, sólo queremos trabajar en paz".