Las tres últimas presentaciones de Central en el Gigante dejaron un sabor agridulce en el paladar de los canallas.
Las tres últimas presentaciones de Central en el Gigante dejaron un sabor agridulce en el paladar de los canallas.
Si bien el equipo no perdió y pudo conservar el invicto, lo cierto es que las igualdades rente a Colón y Huracán (1 a 1 en
ambos casos) fueron como una astilla en las fibras de la ilusión, pese a que en el medio derrotó a San Martín de San Juan 2 a 1. Sobre todo porque no pudo desplazar a Boca de la cima.
No obstante, el hecho de seguir bien prendido y que se haya ganado el respeto de todos sus pares en apenas un par de contiendas es para destacar y recordar que el hincha debe disfrutar el presente que lo envuelve.
Más allá de sus pretensiones y obligaciones, hoy deberá sacar el mayor provecho del encuentro contra Lanús para
volver a pisar y transitar por la carretera del triunfo. No sólo para que todos dejen el estadio con una alegría gigante sino para continuar bien prendido en el lote de los de arriba.