Sin pretender ser tremendistas ni agoreros, el equipo argentino se encuentra a un paso de jugar por el repechaje de la Davis para no descender. Consecuencia del momento actual del tenis nacional. Es que con la excepción de Juan Martín Del Potro, los demás aparecen relegados de los principales lugares del tenis mundial. Demasiado entonces fue lo que hicieron Horacio Zeballos y Eduardo Schwank, dando pelea durante algo más de cuatro horas antes de caer con Fabio Fognini y Simone Bolelli por un ajustado 6/7 (6), 7/6 (8), 7/6 (3) y 6/4. Un resultado negativo que dejó a la Argentina en desventaja con Italia por 2 a 1, en la primera ronda que se juega en Mar del Plata, con la obligación de ganar los dos puntos de singles de hoy, algo que suena a una quimera.
Se sabía que el dobles era crucial para Argentina, considerando que Fognini aparece como fija para sumar sus dos triunfos en los singles, como lo empezó haciendo el viernes contra Mónaco. El interrogante era cómo respondían Zeballos y Schwank, en especial el roldanense, tras una temporada discontinua, con resultados poco auspiciosos en Challengers.
La respuesta ambos la dieron en la cancha. Les dieron pelea a los italianos (con mayor rodaje que la dupla nacional). Más suelto el roldanense al comienzo, cubriendo bien la red, y mejor Zeballos luego, con un primer saque que le permitió tomar la iniciativa a la pareja argentina.
Ninguno de los dos equipos se dieron ventaja en ese set inicial, como sucedería en la mayoría del partido, y fue Bolelli el que sostuvo en esos primeros pasajes a la dupla italiana, con un Fognini errático para volear.
Casi sin resquicios para doblegar al otro, indefectiblemente el parcial se resolvió en el tie break. Argentina se puso 6/1 y lo tenía, pero no lo definió e Italia igualó 6/6. Pero Zeballos logró un miniquiebre con un tiro que superó la resistencia de Fognini y un gran saque del marplatense permitió la volea de Schwank para conquistar el set.
Tan emotivo como ese set fue el segundo. Zeballos estuvo implacable con su primer servicio y Schwank mejoró con un saque que hasta ese momento era inestable. Los toques más sutiles, como algunos globos, eran del marplatense. Los cruces en la red correspondían al roldanense.
Del otro lado, Fognini creció. Sus toques delante de la red fueron una delicia. Y su mano tuvo la precisión y la fuerza para poner pelotas agresivas.
Sin ningún quiebre, circunstancia que recién se daría en el último set, otra vez hubo tie break. Argentina contó con un set point estando 7/6, pero no pudo con una volea de Bolelli. Entonces, Italia lo cerró 10/8 y todo igualado.
El set que se fue dejó algunas señales que se acentuarían en el tercer parcial. Al equipo argentino le costaba cada vez más defender los games con su saque, a Italia, menos. Es que Zeballos y Schwank fueron declinando. No conseguían mantener el equilibrio frente a la regularidad de Fognini y Bolelli. A los argentinos les costaba sostener los peloteos. Y no eran capaces de contraatacar con las devoluciones de saque como sí lo hacían sus rivales.
Más que meritorio entonces que nuevamente forzaran un tie break, ganado por Italia con más holgura que el anterior: 7/3.
La fortaleza mental de la pareja argentina ya no era la misma en el cuarto set. Habían dado todo y costaba imaginar que lo podían levantar. Encima , Italia le rompió el saque a Schwank, en el primer quiebre del encuentro. Sin resignarse, cayeron en el parcial decisivo por 6/4.
La derrota de ayer desniveló la serie. Un quiebre que frente a lo que se viene, duele el doble.