La 19ª fecha de la Superliga está a la vuelta de la esquina. Boca la jugará de una determinada manera. River de otra. Al menos en la previa hay suposiciones de que las previas son distintas. Guillermo Barros Schelotto imagina y planifica un escenario, Marcelo Gallardo otro completamente distinto. Por supuesto que tiene que ver con la ubicación que cada uno ostenta en las posiciones. El xeneize debe ratificar su condición de líder y no permitir que le acorten distancia. El millonario a esta altura parece darle lo mismo lo que ocurra en el torneo local. Es que hoy son 23 los puntos que lo separan de su eterno rival y el objetivo de las copas internacionales también es lejano. Pero así como los técnicos arman sus estrategias pensando más allá del fin de semana, en el ambiente ya se siente el clima de Supercopa. Lo dejaron en claro los hinchas agotando las entradas en un puñado de minutos (ver aparte).
Después de una nueva jornada de trabajo, ambos entrenadores mostraron sus cartas y, claramente, sus intenciones. Todo por un partido que definirá al campeón de la Supercopa entre los clubes más populares del país. Uno, campeón del último torneo local (Boca), y el otro, campeón de la Copa Argentina. Y es por ese contexto que esos 90 minutos de fútbol (en caso de igualdad habrá remates desde el punto del penal) que se disputarán el próximo miércoles en el Malvinas Argentinas de Mendoza hoy ya se viva como una partida de ajedrez.
Para el partido del sábado frente a Tigre la idea de Barros Schelotto es poner mayoría de titulares. ¿Puede tomarse como un riesgo? Quizás. Pero si bien la derrota del pasado lunes contra Argentinos Juniors no le hizo resignar demasiado terreno al equipo, el DT claramente apunta a, al menos, mantener la distancia con sus más inmediatos perseguidores.
En la práctica de ayer (a puertas cerradas), el Mellizo no paró un equipo y dispuso un trabajo táctico entre líneas defensivas y de ataque. No obstante, lo que trascendió es que frente al Matador volverán Lisandro Magallán por el juvenil Agustín Heredia, Leonardo Jara por Julio Buffarini, Frank Fabra por Emmanuel Más, Pablo Pérez desde el arranque por Emanuel Reynoso y Carlos Tevez por Ramón Abila.
Las dudas estarían en el primer marcador central y quiénes acompañarán al Apache en la ofensiva.
Paolo Goltz, quien estuvo ausente ante Alianza Lima y Argentinos por una sinovitis en su rodilla derecha, practicó en la semana en forma normal, pero no se sabe si llegará bien ante Tigre o si el cuerpo técnico lo guarda directamente para jugar ante River.
Sí se habla de la chance de que haya descanso para los extremos Cristian Pavón y Edwin Cardona, por quienes podrían entrar Cristian Espinoza y Gonzalo Maroni, pero eso también todavía está por verse. En la práctica de hoy el entrenador probaría un posible equipo y allí se empezará a develar el posible once para el fin de semana.
Qué distinta es la realidad en la otra vereda, con un River que obtuvo apenas 8 de los últimos 36 puntos en disputa y que ya sin chances de pelear por el título su único y gran objetivo del semestre pasa por vencer a Boca en la final del miércoles. En ese sentido el Muñeco parece decidido a no arriesgar a quienes considera titulares, por lo que el sábado, en Paraná, ante Patronato pondrá un equipo con mayoría de suplentes.
En el ensayo de ayer, Gallardo puso en cancha a: Franco Armani; Camilo Mayada, Jonatan Maidana, Javier Pinola y Milton Casco; Bruno Zuculini; Carlos Auzqui, Juan Fernando Quintero y Enzo Pérez; Rafael Santos Borré y Rodrigo Mora.
Si se toma como parámetro el equipo que igualó 1 a 1 ante Chacarita en la jornada pasada salen Lucas Martínez Quarta, Marcelo Saracchi, Ignacio Fernández, Nicolás De la Cruz, Ignacio Scocco y Lucas Pratto. Claramente también vuelve a ser preservado Leonardo Ponzio. Además, Ariel Rojas y Gonzalo Martínez, ya recuperados de sendas lesiones, tienen chances de ingresar unos minutos ante Patronato y convertirse en opciones de cara a la final.
Con este panorama queda claro que el Muñeco apuesta todas las fichas a lo que suceda en Mendoza. Lo del sábado en Paraná pinta como para ser un mero compromiso.