Boca goleó esta tarde a Gimnasia y Esgrima de Jujuy, por 4-0, en
partido por la primera fecha del torneo Apertura que se disputó en La Bombonera. Los
goles del equipo dirigido por Carlos Ischia fueron anotados por Ricardo Noir, a los 2 minutos;
Leandro Gracián (13), Sebastán Battaglia (33)y Fabián Vargas (43), todos en el segundo
tiempo.
Boca Juniors, con un comienzo tibio y un final arrollador, le ganó 4 a 0 a
Gimnasia y Esgrima de Jujuy, en un partido jugado en La Bombonera y correspondiente a
la primera fecha del torneo Apertura.
Todos los goles xeneizes fueron convertidos en el segundo tiempo, ya que
abrió la cuenta, a los 2 minutos, el juvenil Ricardo Noir; aumentó a los 13 Leandro Gracián,
incrementó la cifra Sebastián Battaglia, a los 33, y cerró la cuenta el colombiano
Fabián Vargas, a los 43.
Gimnasia y Esgrima de Jujuy finalizó el partido con diez jugadores pues
fue expulsado el mediocampista Fabián Pieters, a los 18 minutos de la segunda etapa.
En el primer tiempo, Boca Juniors no jugó bien, fue contenido por el
conjunto norteño, que expuso una férrea defensa, pero en la segunda etapa, la solidez de
Gimnasia y Esgrima de Jujuy se derrumbó tras el primer gol convertido por el entrerriano
Noir, que había suplantado a Lucas Castromán.
Fue precisamente el comienzo de la goleada, ya que amplió el marcador
Leandro Gracián, que había reemplazado a Cristian Chávez, de floja labor.
Y la goleada se plasmó con sendos goles de Battaglia y Vargas, para
redondear una actuación de Boca que fue convincente en la segunda etapa.
Es que en la etapa inicial, sin su volante estrella Juan Román Riquelme,
el conjunto xeneize sintió la falta de un conductor, ya que el juvenil Cristian Chávez,
estuvo durante varios minutos fuera de la cancha por una lesión en su rostro y su producción
no alcanzó para desequilibrar el juego.
Con el clásico esquema de 4-3-1-2, Boca intentó imponer su juego, pero se
encontró con un rival que dispuso un sistema táctico de 3-5-2 y pobló el
mediocampo.
Fue precisamente Gimnasia y Esgrima de Jujuy, el que provocó inquietud en
La Bombonera, cuando César Carranza, a los 5 minutos remató con violencia, pero su tiro fue
rechazado por Julio Cáceres.
Respondió Boca con un veloz contraataque que encabezó Lucas Castromán,
quién habilitó a Jesús Dátolo, pero el tiro del jugador bonaerense se fue desviado.
A los 12 minutos, un choque entre Daniel Ramasco y Cristian Chávez,
provocó la caída del jugador xeneize quien con evidentes muestras de dolor y sangre en su
cara se retiró por unos minutos del campo de juego.
Boca, pese a que exhibió un juego desprolijo fue llevando peligro hacia la
valla defendida por Nereo Fernández, quién respondió con solvencia.
A los 18 minutos, Sebastián Battaglia, tras una buena combinación con
Dátolo, remató y su tiro pegó en el travesaño.
Dos minutos después, un tiro libre de Lucas Castromán fue conectado de cabeza por
Palermo, pero su envió pegó en Pieters, que rechazó el balón.
Lesionado Chávez, Boca no creó demasiado peligro, salvo algunos arrestos
individuales de Castromán o Datolo, y entonces el “Lobo” jujeño adelantó sus
líneas.
Así transcurrían 28 minutos, César Carranza se escapó por su sector, y
lanzó un violente remate que se colaba en el ángulo, pero apareció Mauricio Caranta que salvó
a Boca con una estirada espectacular.
Los últimos minutos de ese período se diluyeron en la intrascendencia de
Boca y el fervor del modesto conjunto dirigido por Omar Labruna, que con pocos atributos pudo
enfriar el partido y evitar la apertura del marcador.
En el segundo tiempo, por la dolencia de Chávez (golpe en el rostro)
ingresó Leandro Gracián y para darle mayor penetración al ataque Ischia puso a Ricardo Noir
por Lucas Castromán.
A los 2 minutos de comenzada la segunda etapa, Boca abrió el marcador a
través de Noir, que ingresó libre de marcas, y conectó tras un pase de Palermo, luego de un
centro que no había podido cabecear Julio Cáceres.
A partir de allí, Boca dominó a voluntad, porque luego de sendos cabezazos
de Palermo, que esta vez le ganó al chileno Sebastián Rocco, que fue su marcador,
Leandro Gracián fue su conductor y distribuidor.
Fue el propio ex jugador de Vélez Sarsfield, el que marcó el segundo gol,
a los 13 minutos, y a partir de allí el avance de Boca fue arrollador.
Así, fueron llegando los goles de Sebastián Battaglia y Fabián Vargas, que
sellaron el marcador con una espectacular goleada.