El torneo de tenis de Wimbledon vivió hoy una nueva sorpresa de enormes magnitudes con la eliminación de Roger Federer en la segunda ronda.
El torneo de tenis de Wimbledon vivió hoy una nueva sorpresa de enormes magnitudes con la eliminación de Roger Federer en la segunda ronda.
El suizo, siete veces campeón en el All England y al menos cuartofinalista en los últimos 36 torneos de Grand Slam, cayó ante el ucraniano Sergiy Stakhovsky 6-7 (5-7), 7-6 (7-5), 7-5 y 7-6 (7-5) en exactas tres horas de juego que quedarán guardadas en la historia del tenis.
“La temporada no termina aquí. Estamos en la mitad y todavía queda mucho tenis”, dijo Federer tras el encuentro.
Vestido con una remera a rayas, con los brazos cruzados y erguido hacia adelante, Federer afrontó con su habitual calma una de las derrotas más impactantes de su carrera.
“Me sentía bien. Hoy era un día normal, calentamiento normal. Esperaba ganar el partido, pero no pude”, fue su simple explicación. Pero “siempre es decepcionante perder cualquier partido, especialmente aquí”, admitió.
“¿Qué hacer después de algo así? Uno no debe tener pánico, eso es claro. Simplemente volver a trabajar y regresar más fuerte. Es simple. Duro de hacerlo a veces, pero usualmente puedo dar vuelta las cosas bastante bien”, dijo el campeón defensor, que negó que sea el final de una era. “No, porque aún tengo planes de jugar varios años más”.
Emocionado, Stakhovsky apenas tuvo palabras al término del encuentro. “Mágico. Fue fantástico definitivamente. Estoy realmente feliz. Hoy debí jugar primero contra Roger y luego contra lo que representa su figura”, comentó el ucraniano de 27 años y número 116 del ranking, que nunca había vencido a un jugador entre los diez mejores.
Dos días después de la eliminación del español Rafael Nadal en primera ronda, el mundo del tenis asistió hoy perplejo a un nuevo impacto monumental.
Wimbledon venía ofreciendo ya una jornada plagada de sorpresas y lesiones, incluidas las eliminaciones de la rusa Maria Sharapova, la bielorrusa Victoria Azarenka y el francés Jo-Wilfried Tsonga, entre otras figuras, pero se había guardado para el final su máximo impacto.
Considerado por muchos el mejor tenista de todos los tiempos, y rey indiscutido en la hierba de Wimbledon, Federer no perdía tan temprano en un torneo grande desde 2003, entre muchas otras marcas que se batieron hoy.
Pese a recuperar un quiebre abajo en la cuarta manga y disponer de un punto para set para llevar el encuentro a un quinto parcial, el suizo nunca encontró la vuelta a un Stakhovsky que lo atacó todo el tiempo subiendo a la red y terminó festejando de rodillas en la catedral del tenis.
El torneo más emblemático se quedó así sin Federer y Nadal, los dos jugadores que dominaron al tenis en la última década, ambos eliminados increíblemente por jugadores por fuera de los 100 mejores del mundo.