Ahora sí se puede decir que la selección argentina puso primera de cara al
Mundial de Sudáfrica. Después de lo que fue la convulsionada despedida del plantel desde el
aeropuerto internacional de Ezeiza (también hubo mucha gente en el predio de la AFA), la delegación
comandada por Diego Armando Maradona hizo pie en tierras sudafricanas para comenzar la puesta a
punto de lo que será el debut ante Nigeria, previsto para el 12 de junio. Las expectativas son
tantas que además de algunos hinchas, hubo una fuerte vigilia de parte de los periodistas, ya
apostados en Pretoria.
Así, luego de más de nueve horas de viaje, la delegación argentina que partió el viernes por la
tarde de Buenos Aires llegó a Johannesburgo, a las 3.40 (8.40 hora local) y una hora más tarde
arribó en micro a Pretoria.
Los jugadores y el cuerpo técnico bajaron de buen humor del avión y la mayoría descansó sin
problemas durante todo el viaje.
Una vez en Johannesburgo, y luego de los trámites migratorios, el plantel argentino se subió a
un micro —hubo dos, atrás iban los dirigentes y allegados— y desde la pista partieron
hacia Pretoria.
Escoltada por seis motos y tres autos de la policía, la delegación argentina viajó en micro los
poco más de 60 kilómetros que separan Johannesburgo de Pretoria.
En la sede de la Universidad de Pretoria a los jugadores argentinos lo esperaron casi un
centenar de medios y unos pocos curiosos.
Por pedido de la AFA, a unos cien metros del ingreso al predio se colocó una valla policial y
nadie pudo ver de cerca de los jugadores ni al cuerpo técnico.
Sólo los fotógrafos con sus lentes pudieron tomar imágenes de los argentinos ingresando al hotel
de la Universidad de Pretoria, donde dormirán y entrenarán.
Maradona, en el aeropuerto, se mostró de buen humor, saludó a la gente y a la hora de subirse al
micro ocupó el primer lugar, secundado por sus ayudantes de campo Alejandro Mancuso y Héctor
Enrique.
Una vez que todos se bajaron del micro, la delegación fue a desayunar para luego acomodarse en
sus respectivas habitaciones.
Todo transcurrió en calma, tal como esperaba no sólo el cuerpo técnico y jugadores, sino los
dirigentes que viajaron acompañando a la delegación.
La idea es que hoy comiencen con los trabajos fuertes pensando en el partido debut mundialista,
que será el sábado 12 de junio, en Johannesburgo, frente a los nigerianos. Y está claro que desde
hoy todo cambiará en el predio de Pretoria. Los entrenamientos comenzarán a entregar señales más
directas respecto al equipo y el clima ya no será el mismo.
El primer partido contra Nigeria está cada vez más cerca (Argentina jugará ante Corea del Sur el
jueves 17 de junio, también en Johannesburgo y el martes 22 cerrará su participación en el Grupo B
enfrentando a Grecia, en Polokwane) y ahí apuntan todos los cañones.
El saludo de Diego: "Hola Sudáfrica"La calma con la que el seleccionado arribó a Sudáfrica nunca
se alteró, sobre todo porque los periodistas no tuvieron contacto con los jugadores. De todas
formas, la nota la dio Diego Maradona. El DT fue el único que frenó en su camino y junto a un
afiche que anuncia la Copa del Mundo en el aeropuerto, levantó su mano derecha y ante los flashes
dijo tres veces: "Hola Sudáfrica".