La carrera terminó por tiempo debido al ingreso del auto de seguridad en cuatro oportunidades. No obstante, fueron 25 vueltas de 30 pactadas a puro vértigo. Matías Rossi ratificó lo que venía haciendo desde el pasado viernes en el Fangio. El Misil largó segundo la final hasta que en cierto pasaje tomó la punta y no la largó más. Todo lo contrario. La resultante marcó que el piloto de Ford le pegó un paseo bárbaro al resto de los competidores, tras cerrarse la 5ª fecha del TC. Completaron el podio Gabriel Ponce de León (Ford) y Christian Ledesma (Chevrolet) en una jornada donde los zonales no la pasaron nada bien.
Rossi necesitó 50m 30s521 para quedar en la historia del Fangio. Le sacó una gran diferencia a sus inmediatos perseguidores. El cronometro marcó que fueron 3s493 de ventaja sobre el primer escolta Ponce de León. Obtuvo una victoria tan fácil como contundente por tener un auto espectacular.
La final tuvo cuatro ingresos del auto de seguridad. La pista húmeda, como consecuencia de la fuerte lluvia que se había desatado a la madrugada y el ímpetu por querer avanzar, hizo que hubiera varios toques.
También hubo varias deserciones por diferentes motivos. Fue una carrera que tuvo todo tipo de condimentos en realidad. El público disfrutó en todo momento del show.
Aguirre tocó a Castellano en el giro 13 y al final fue sancionado tras finalizar, por eso Guillermo Ortelli quedó 4º en la general con el Chivo. En ese mismo momento y más adelante, Matías Rossi se comía a Gabriel Ponce de León y pasaba a comandar la carrera de manera sublime hasta ver la bandera a cuadros antes que todos.
Domingo negro para los zonales
Los pilotos regionales tuvieron un domingo para el olvido. Facundo Ardusso primero padeció un problema en la transmisión del Torino y luego terminó abandonando. En tanto, el rafaelino Nicolás González (Torino) se pegó contra el paredón, volvió a la línea pero quedó de cola al final del día: fue 29º de 31 autos que terminaron la visita histórica del Turismo Carretera en nuestro trazado.
Ardusso quería otro cierre. Tenía la ilusión de hacer podio. Pero el Toro jamás se adaptó al autódromo y lo pagó cada vez que salió a correr. El parejense fue local en las tribunas pero se fue masticando mucha bronca tras irse de largo al intentar superar a Catalán Magni y parar luego en boxes para abandonar.
Otro que buscará revancha en breve será Nicolás González. El rafaelino se dio duro contra el paredón de la última curva en el giro 13. Por eso llegó muy de cola con el Torino. En la próxima cita, que será el próximo 26 en su ciudad natal, tratará de estar a la altura como buen anfitrión que promete ser.