Por diversas circunstancia, la pareja de volantes centrales se fue modificando en este semestre, ya sea por una cuestión táctica, estado físico o suspensión. El mediocampista con mayor participación es Nery Leyes. Mientras que los otros que jugaron hasta acá son Juan Ignacio Sills, Jalil Elías y Braian Rivero, este último de mejor desempeño que los otros dos y quien se supone que volverá contra Chacarita al haber cumplido frente a Vélez la fecha de suspensión.
La actuación de Leyes fue de lo poco rescatable en la derrota en Liniers, a partir de su entrega y de distribuir con cierto criterio la pelota. No pasó lo mismo con Elías, de rendimiento discreto, que jugó debido a la suspensión de Rivero.
Jalil Elías fue titular en el primer encuentro de la Superliga, frente a Unión (1-1), en compañía de Juan Ignacio Sills, de pobre desempeño ese día. En los partidos siguientes, ante Godoy Cruz (1-2) por la Copa Argentina y contra Huracán (0-1) por la Superliga, la pareja de volantes centrales estuvo conformado por Elías y Leyes, este último suplente ante el tatengue porque venía de sufrir una lesión.
Ante la falta de fútbol, Llop se inclinó por sacarlo a Elías para que ingrese Rivero contra Olimpo (2-0). Esta modificación le dio resultado y mantuvo a Rivero junto a Leyes en los dos enfrentamientos posteriores, ante Lanús (0-1) y Godoy Cruz (0-0).
La expulsión de Rivero ante el Tomba obligó a Llop a un nuevo cambio para medirse con Vélez. Eligió a Elías, pero como no anduvo bien, resaltó más la ausencia de Rivero, que sin haber tenido una irrupción fulgurante en primera le dio mayor juego al equipo.
En cuanto a la tarea de obstruir, Rivero tiene que corregir la cantidad de infracciones que comete. Es uno de los 20 jugadores del fútbol argentino que mayor cantidad de faltas registra en la Superliga, según el sitio de estadísticas Data Factory. Por esta razón, no es casualidad que haya sido expulsado ante Godoy Cruz.
Más allá de cuestiones individuales, que no son un tema menor, la ubicación de los volantes para interrumpir el juego rival se repitió en todos los partidos y delató el inconveniente que se expuso en la página 4.