En Central no hay margen para el rélax. El tiempo apremia. La balsámica igualdad ante el puntero e invicto Colón pasó a la historia. Los canallas volvieron a poner los pies sobre la tierra. El próximo sábado tendrán una nueva y exigente prueba. Recibirán a Central Córdoba. La escuadra santiagueña es una de las actuales protagonistas de la zona A. Para Cristian González no hay labor sencilla de resolver. Deberá definir a la brevedad varios lineamientos a plasmar contra el ferroviario. Resta saber si el entrenador auriazul ratificará la poblaba defensa como marca la lógica y determinar si pondrá a Gastón Ávila entre los titulares. Mientras que del medio hacia arriba no habrá que sorprenderse si el Kily también mete mano.
La retaguardia no es lo de menos
El loable punto obtenido en cancha de Colón se basó en parte en el rendimiento que exhibieron algunos de los cinco defensores que puso el Kily González en cancha: Damián Martínez, Facundo Almada, Nicolás Ferreyra, Joaquín Laso y Lautaro Blanco.
El reto a cumplir a rajatabla en rodeo sabalero era defender primero y atacar después. El equipo cumplió, pese a los vaivenes que mostró en toda la contienda.
Sin embargo, para el partido con Central Córdoba se abre un interrogante. Y grande. Rosario Central no debería repetir el nutrido esquema que implementó en el Cementerio de los Elefantes en la última línea. El solo hecho de jugar en el Gigante obliga a modificar la estructura. Al menos eso marca el sentido común.
El contrapunto es que Cristian González quedó satisfecho con el sistema trazado ante Colón, pese a los altibajos que mostró atrás a lo largo de todo el encuentro, que recién sobre el final dejó de ser chato para ponerse atractivo. Aunque contra los santiagueños debería revisar la fórmula.
Claro que la necesidad de seguir sumando condiciona al entrenador canalla, quien a su vez no se pondrá colorado ni mucho menos si tiene que mantener el poblado sistema defensivo, más allá de ser local.
¿Vuelve el Gato?
Durante el transcurso de la semana habrá que seguir con atención la evolución de Gastón Ávila. El zaguero central debería tener el alta médica, ya que en su momento se informó que la recuperación de una lesión acromioclavicular grado 2 le demandaría entre dos y tres semanas. Para este desafío tendría que estar a disposición del entrenador canalla.
Si recupera la titularidad como se presagia, el Kily González entonces pondrá manos a la obra en el fondo. El Gato entraría en lugar de Joaquín Laso, más allá de que ante Colón quien ingresó por la ventana al equipo fue Facundo Almada. El resto de los nombres no se tocaría. Puntualmente porque rindieron.
La inclusión del juvenil defensor Ávila no es un dato menor para este Central. Hasta la lesión contra Racing en Avellaneda siempre se destacó del resto de sus compañeros de la última línea. El equipo perdió desde entonces una pieza esencial.
El entrenador no puede seguir dándose el lujo de prescindir otro encuentro más sin el ex Boca y Tiro Federal. Pero todo dependerá de cómo se sienta el zurdo jugador. Aunque si recibe el okey por parte del staff médico, cae de maduro que el sábado saldrá en la foto principal cuando se momento de jugar contra los santiagueños. Luego se verá si suple a Laso o a Almada.
El medio podría partirse
Otro de los grandes dilemas y desafíos que sigue sin resolver Cristian González recae en la generación de juego. Sobre todo a la hora de encarar hacia el campo enemigo. La principal falencia que muestra el mediocampo canalla es que florece y destila impotencia sin pausa.
Emiliano Vecchio quedó expuesto otra vez. Esta vez ante Colón porque se lo notó agotado en los minutos finales. El 10 auriazul fundió biela antes de pitazo final porque se dedicó casi siempre a correr sin rumbo y en soledad cuando Central no lograba tener la pelota.
Cristian González pretende que el capitán no baje tanto. Pero lo que no tiene en cuenta el entrenador es que el jugador retrocede varios metros por inercia y deseos naturales de hacerse dueño de la bocha y generar así lo que todos esperan del creativo volante.
Otro punto a analizar es si el esquema que implementa fecha a fecha el Kily es el aconsejable para jugar con enganche. Sobre todo cuando el técnico continúa sin encontrarle o darle un socio al experimentado profesional. Así se torna imposible poder ver la mejor versión de Vecchio, quien suma millas en campo pero no parece porque últimamente corre sin sentido. No habría que descartar nada en este punto.
Rodrigo Villagra parece no tener competidor a corto plazo. El cordobés sigue evolucionando y siendo importante en el plantel. Seguirá entre los once, demás está decir.
En tanto, Rafael Sangiovani se mantiene en el medio por decisión táctica. El juvenil sigue sin hacer pie en la función de doble cinco. Suele meter y correr más que pensar y generar real peligro del medio hacia arriba.
Otro punto a seguir será en base a la chance de ver a Martín Rabuñal desde el inicio. Podría ser una buena excusa verlo ante Central Córdoba de entrada.
Arriba, poca fuerza
La inserción de Patricio Cucchi entre los titulares va perdiendo peso tras dos partidos. El atacante llegó como nueve de área y el Kily lo está utilizando como un correcaminos por las bandas. Es más, se lo vio más defendiendo que intentando atacar. Central necesitará ante los santiagueños más dinámica ofensiva. ¿Seguirá entre los once? Tal vez sea turno de ver de lleno a Alan Marinelli, quien en el torneo pasado dejó una grata impresión, pero en este certamen viene teniendo poco rodaje.
Mientras que Marco Ruben va afianzándose poco a poco. Jugó todo el partido contra Colón. El físico respondió, pese a que hacía un año que no aguantaba los 90 minutos. Pese a todo, sigue siendo la esperanza del gol canalla, que ante los santiagueños podría tener variantes importantes.