Por pura coherencia de ambas partes. Alemania tuvo unos 10 técnicos en 90 años y Argentina tuvo 9 en sólo 10. Mientras Alemania sostiene un proceso, Argentina tiene que alterarlo completamente y eso que a Sampaoli no le fue peor que a Löw. Sucede que la posible expulsión del técnico argentino, a quien no puedo respetar intelectualmente después de que escribió un libro donde dice que no escribe ni lee y desprecia la planificación, no tiene que ver sólo con cuestiones futbolísticas sino con internas de poder en AFA. A la muerte de Grondona se desató una feroz interna política y sobre ese caos, plagado de intereses personales y políticos, se da esta crisis. Para mí Daniel Angelici es Macri, un operador del poder, y no hablo de Tapia, que es irrelevante, el poder es Angelici. La diferencia con Grondona es que acumulaba tanto poder que condicionaba al poder político y hoy es al revés. Grondona le impuso un tipo como Araujo al kirchnerismo porque tenía poder suficiente aunque el gobierno era quien ponía la plata. Otro ejemplo es el de 1986, cuando Alfonsín mandó al subsecretario de deportes, Osvaldo Otero, a echar a Bilardo y Grondona lo frenó y le dijo: "Dedicate al rugby que vos de fútbol no sabés nada".