La presentación en el torneo local. El próximo desafío que será por Copa Argentina. Todo entra dentro de la misma bolsa en el presente canalla. Y de una estación, la que ya pasó, se parte hacia la otra, de la que se quiere sortear de manera positiva. De Colón a Deportivo Riestra. En el medio, las evaluaciones y las expectativas. Estas últimas sin dudas gozarán de buena salud de acuerdo a la lectura que Paolo Montero hizo después de los primeros 90 minutos del semestre. "El debut del equipo me dejó contento", fue una de las frases sobresalientes del uruguayo respecto al empate en Santa Fe en el mano a mano que el técnico mantuvo con Ovación.
"A pesar de haber sido el primer partido, con la ansiedad lógica y el debut de muchos jugadores nuevos, la labor del equipo me dejó muy contento por la actitud y por el orden táctico que tuvimos, que era un problema que nos tenía un poco preocupados en los partidos amistosos", destacó Montero, de quien todavía no se había podido escuchar sus conclusiones por la decisión de no hablar después del partido en el Brigadier López. Sobre eso también hizo referencia (ver aparte).
"Me puso muy bien el partido que hizo Mauricio (Martínez)", agregó Paolo en lo que fue, a su criterio, uno de los datos sobresalientes del primer partido de Central en la Superliga, amparado, claro está, en la decisión que había tomado de ubicar al ex Unión en la posición de segundo marcador a raíz de la tardía llegada del refuerzo en ese puesto. Y agregó: "Después, los nuevos también lo hicieron muy bien, más allá de que obviamente sabemos que tenemos que seguir mejorando. Teniendo en cuenta lo fuerte que se hace Colón en su cancha, creo que fue un debut positivo".
-¿Estuvo acorde a las expectativas del cuerpo técnico?
-Estuvo acorde porque sabemos la personalidad de los jugadores. Por algo los pedimos. Desde que llegamos a Rosario dijimos que tenemos muy claro que para jugar en equipos con tanta presión muchas veces es más importante la personalidad que ser bueno técnicamente. Y nosotros a todos los jugadores que vinieron les prestamos mucha atención en esa personalidad. En ese sentido creo que estamos bien.
-¿En ese primer partido dejaron claro la diferencia entre un amistoso y un partido por los puntos?
-Vos, como periodista, ¿qué comentarías después de haber visto de cada amistoso? Te hubieses ido preocupado. Es la misma preocupación que sentimos nosotros. Pero nosotros siempre tuvimos una ventaja, que conocemos en profundidad a todos los jugadores. Nos podemos llegar a preocupar un rato si se comete algún error, si no se cumplen algunas cuestiones tácticas, pero tuvimos siempre la tranquilidad que nos daba el conocimiento de la personalidad. Siempre supimos que se iban a brindar al ciento por ciento.
- Varios jugadores en el mismo estadio de Colón dijeron algo similar, respecto al salto de calidad que dio el equipo en relación a los amistosos.
-Bueno, me pone contento que los mismos jugadores hayan sentido también esto. Creo que sirve para confirmar lo que siempre digo sobre que en este plantel no necesito intervenir en nada porque son todos muy autocríticos y saben cuándo las cosas se hacen bien y cuándo no.
-Antes del arranque hablaste de que se iba a ver un Central diferente. ¿Viste ya algo de eso contra Colón?
-Puede ser. Te puede pasar más jugando de visitante, donde te pueden salir a presionar como lo hizo por momentos Colón, y ahí tenés por ejemplo el juego aéreo que te permite la condición física de Zampedri, en quien nos podemos apoyar para otros movimientos que puedan hacer Ruben, Camacho y Carrizo.
- ¿Esa fue la diferencia más grande que notaste?
-Lo que pasa es que con Zampedri te brinda esas cosas. También está el tema de la pelota parada con Gil. Hay muchos partidos que se presentan cerrados, incluso de local, que podés llegar a abrirlo con una pelota quieta. De todas formas, vimos ya muchas veces el partido y notamos que salieron muchas jugadas con toques de primera. También nos gustaron algunas diagonales que se hicieron. Me gustó que en ciertos sectores de la cancha se intentó jugar a dos toques para mover rápido al equipo rival y así generar los espacios por el lado opuesto. Pero esto recién empieza y tenemos que seguir creciendo. En lo personal estoy contento y si alguien notó estas cosas me pone más contento todavía.
A excepción de Tobio, debutaron todos los que llegaron, incluso Ortiz, quien ingresó por Martínez. ¿Creés que los refuerzos estuvieron a la altura?
- Noté un nivel parejo, pero creo que eso se debe a la integración que tiene este plantel, lo que nos facilita mucho el trabajo como cuerpo técnico. El compromiso de todos de querer jugar también colabora. Mirá lo que pasó con Ortiz, quien viene de un equipo humilde como Boca Unidos, que no sólo debutó, sino que le tocó ingresando desde el banco en medio de un partido que estaba picante. Bueno, no calentó como debía calentar y encima le tocó en la posición de zaguero, y me gustó mucho como lo hizo. En realidad me fui conforme con todos los refuerzos porque hacían su estreno en un escenario complicado, ya que Colón en el último semestre se hizo fuerte porque perdió muy pocos partidos. El trabajo de todos ellos los considero positivos.
-Ahora se viene Riestra. ¿Cómo se prepara un partido ante un rival de menor jerarquía?
-Será un típico partido de Copa Argentina, como el que vivieron ya muchos equipos de primera y como los que ya vivimos nosotros contra Cañuelas. Porque si somos totalmente sinceros no sé si Cañuelas no mereció al menos empatar contra Central. Acá lo más importante para encarar un partido de estas características es de qué forma lo encarás a nivel mental. Si nosotros lo hacemos de la misma forma que el semestre pasado y que contra Colón tenemos fe de que la diferencia en algún momento se notará. Pero tenemos que ir pensando en que va a ser un partido cerrado, contra jugadores de jerarquía porque por algo Riestra subió de categoría. Tendremos que tener mucha atención y concentración.
-Con todo esto que decís vas con lo mejor que tenés a mano.
- Sí, olvidate. Vamos con lo mejor por el hecho de que tomamos el partido de una manera muy seria y porque nos interesa mantener el ritmo de competencia. Por suerte está la fecha Fifa y podemos jugar domingo y domingo, como por el torneo local. Lo tomamos de esta forma porque tenemos la suerte de encarar la otra semana con San Lorenzo ya con otro partido en el lomo.
-¿Hablaste con los jugadores sobre que el objetivo más cercano es la Copa Argentina?
-Los jugadores saben, sobre todo porque lo transmiten los que están hace años en el club, que la Copa Argentina es importante.
-¿Sentís el peso de las tres finales perdidas?
-N o. Todos me hacen sentir que se perdieron tres finales pero yo no lo tomo como un peso. Está claro que vamos a ir a jugarla con lo mejor que tenemos y si podemos le vamos a tirar el arco abajo a Riestra, después a Boca y cualquier otro equipo.
"No hablé para evitar inconvenientes"
Montero se jugaba un partido especial en cancha de Colón, donde sufrió el hostigamiento por parte de los hinchas luego de su partida intempestiva del club rojinegro. "No sentí que haya sido tan grave, tal vez porque estaba demasiado metido en el partido", dijo el DT uruguayo respecto a los insultos que los sabaleros le propinaron. Más allá de eso, el técnico aclaró porqué se inclinó por no formular declaraciones. "No hablé para evitar cualquier tipo de inconvenientes. A los dirigentes les había dicho que si querían que hiciéramos una conferencia al lunes siguiente. El día del partido decidió no hablar porque no quería involucrar a nadie", dijo. Y agregó: "El marco no influyó para nada. Había tomado la decisión en la semana. Sé con la gente que me muevo. Y ojo que Colón no hizo nada raro".
Un cambio y una duda
La semana se tornó complicada para Paolo Montero, quien se vio obligado a meter mano en el equipo. Por la baja obligada de Alfonso Parot apareció Elías Gómez, mientras que en lugar de Santiago Romero (aún en duda) le llegó el turno a Gustavo Colman. El resto, todo igual que hace unos pocos días contra Colón. Al menos es lo que dejó en entrenamiento futbolístico de ayer, en el que el DT uruguayo comenzó a probar el equipo que el domingo enfrentara a Deportivo Riestra.
La primera lectura que se debe hacer es que Montero se abrazó a la lógica.
Parot está descartado para el domingo debido a la contractura en el isquiotibial. Y a primera vista hay un solo jugador como reemplazante natural del chileno. Se trata de Elías Gómez, quien jugó en esa posición todos los amistosos de pretemporada.
De esta forma a Gómez se le presenta una chance más que importante. Es uno de los jugadores que retornó de sus préstamo (la última temporada actuó en Defensa y Justicia) y rápidamente tiene la posibilidad de mostrarse y demostrarle al técnico que está capacitado para jugar.
Y si de lógica se trata, la del mediocampo es más clara todavía. Ausente Romero, a quien todavía lo mantienen en duda a raíz de la quemadura con agua caliente que sufrió en el muslo izquierdo, Paolo retrocedió sobre sus pasos y apeló a la fórmula que utilizó durante toda la pretemporada. Adentro Colman y un cambio de función de Leonardo Gil.
Quizá esta apuesta, que contempla un mediocampo con menos marca que el que puso en cancha en el Brigadier López, se deba a que el rival sea Riestra, un equipo que más allá del respeto que Central le dispensará se entiende que es de menor jerarquía.
De todas formas, si el uruguayo hoy se entrena con normalidad es probable que Montero lo considere y que mantenga su lugar entre los once.
Por lo demás, el conformismo del entrenador con el partido hecho hace seis días en Santa Fe, más el desafío que implica seguir con vida en la Copa Argentina es lo que lleva a poner en cancha lo mejor que tiene.