¿Cuál es la fórmula para hacerle un gol a Newell’s? Seguro es la pregunta que se plantea cada uno que lo enfrenta. Pasó Estudiantes de La Plata sin encontrar el modo de mandar la pelota al fondo del arco de Ramiro Macagno. Desde esa enorme resistencia defensiva que expuso el conjunto rojinegro en La Plata construyó una valiosa victoria por 2 a 0 que lo mantiene en soledad en la primera posición. El blindaje del fondo no es nada que a esta altura sorprenda. Es la base sobre la que se sostiene la gran campaña que está cumpliendo. Primero cierra filas atrás y después es punzante adelante, en ocasiones sin llegar tanto. Así se sostiene un puntero práctico y efectivo.
La entrega y el convencimiento del planteo a desarrollar lo pone en práctica con eficacia. A partir de estar atento en las marcas y a cerrar los espacios hacia atrás, el equipo apenas recibió un gol en contra en cinco partidos. Y ese tanto que ni siquiera fue de una jugada en movimiento. Lo anotó de penal Cristian Galoppo, en el tiempo adicional, para descontar para Banfield en la victoria rojinegra en el estadio Florencio Sola por 2 a 1. Fue en la apertura del torneo y desde ese momento no le volvieron a convertir a la lepra.
El cambio de esquema, a partir de la 4ª fecha, no modificó la solidez defensiva. En todo caso, la fortaleció. Aunque como resaltó Sanguinetti, el sistema depende del rival, por lo tanto es posible que vuelva a cambiarlo en cualquier momento, siempre manteniendo la idea del orden y la agresividad defensiva, llevada a cabo desde la intensidad y despliegue. Características que ya se habían comenzado a mostrar en el torneo pasado.
El dibujo de Newell’s fue el 4-3-3 desde esa victoria contra Banfield, pasando por el empate con San Lorenzo (0-0) en el Coloso y hasta el triunfo frente a Talleres (1-0) en Córdoba. En esos partidos tuvo en la última línea a Armando Méndez, Cristian Lema, Willer Ditta y Martín Luciano o Marco Campagnaro. En el medio, Marcos Portillo o Pablo Pérez, Julián Fernández y Guillermo Balzi. Y los puestos de arriba fueron de Pancho González, Juan Manuel García y Ramiro Sordo.
Otro sistema, más fortaleza
Pragmático, Sanguinetti entendió que era imprescindible retocar el equipo, aunque los resultados conseguidos hasta ese momento resultaron positivos. Pensó en la manera de potenciar las virtudes y ocultar las carencias. También en el mejor sistema para contrarrestar a su siguiente rival, Argentinos, y su vocación de hacerse fuerte desde la posesión.
Entonces armó un 5-2-3. Le dio resultado y Newell’s ganó por 1 a 0. En consecuencia, lo repitió ante Estudiantes. Y volvió a funcionar, con el trabajo de todos. Porque así labura los partidos la lepra, corriendo desde el más adelantado hasta el último de atrás. Sin dar respiro. Lo demuestra la mayoría de los tiros al arco o cabezazos que ensayó el pincha. Fueron forzados, sin libertad para que alguno la mande adentro.
El trío de zagueros, con Lema, Velázquez y Ditta, controló el ataque pincha, respaldado por los laterales volantes Jacob, reemplazante de Méndez, ausente por Covid, y Vangioni. Julián Fernández batalló en el medio y dio una mano en el retroceso. Sforza contuvo, no perdiendo la orientación acerca de dónde cubrir los espacios. Sordo y Panchito bajaron por los costados para dar una mano. García exigió y presionó cuando el rival la traía y estaba a punto de atravesar la mitad de la cancha.
Hasta en esto último la lepra cambió. Ya no es común que los delanteros asfixien alto. Todo el equipo juega más retrasado. Achica espacio hacia atrás y levanta un muro en cercanías de Macagno. No le da chance al rival de llegar con la pelota al pie. Así Lema se mueve dentro del área a sus anchas, sacando de arriba y de abajo.
Sin grandes dotados con la pelota, la lepra prioriza hacerse fuerte desde el fondo y apuesta a un fútbol vertical, a llegar con pocos toques. El sitio de estadísticas Data Factory detalla que Newell’s tuvo un 40 por ciento menos de pases que Estudiantes. Y un 59 por ciento por debajo de Argentinos, el anterior rival. Una muestra clara del fútbol que practica.
Newell’s además encontró un arquero sobrio como Macagno que brinda la cuota de seguridad para que la racha sin goles en contra se prolongue. El uno es el último recurso con el que cuenta el conjunto rojinegro, si se es que el resto no llega a cortar el ataque rival. En definitiva, entre todos se complementan para no recibir goles. Es una enorme virtud que explica por qué la lepra es el líder.
El descanso es hasta el martes
Apenas se conoció que se postergaba el partido de Newell’s contra Aldosivi del miércoles 29 de junio por la Copa Argentina, Javier Sanguinetti licenció al plantel hasta este martes.
La decisión se justifica por la seguidilla de partidos que jugaron y el trabajo continuo. Aparte el próximo encuentro recién será el lunes 4 de julio, ante Patronato, en el Coloso.