Central se reencontró con su gente y lo festejó con un triunfo. Con un gol de Fernández en el primer tiempo, el equipo del Chacho Coudet consiguió una victoria sin atenuantes ante Cerro de Uruguay, un equipo débil que intentó contener los avances canallas sin suerte y en algunos pasajes con excesiva aspereza.
Tal como lo venía haciendo en la pretemporada, Montoya se destacó por su habilidad y vocación ofensiva en un equipo auriazul que volvió con un planteo sin demasiados novedades respecto del que se lució, aunque no consiguió los objetivos que se habían planteado el cuerpo técnico, en la temporada pasada.
El regreso del Chaco Herrera fue prometedor. Se mostró rápido, inquieto y lo más importante con una gran intuición para buscar el arco real. Lo demostró en su primera intervención, a los 11 minutos del segundo tiempo, cuando estuvo a punto de convertir de cabeza después de tirarse en palomita para alcanzar un centro de Salazar.
Al cabo del primer tiempo, Central se fue al vestuario con un triunfo parcial por la mínima diferencia ante Cerro de Uruguay. La conquista, que no llegó antes por la mala puntería de Larrondo, la consiguió Fernández que, en una jugada enredada, con convicción empujó la pelota a la red.
Fue una jugada de Montoya, el volante por derecha que se destacó en la formación que puso en cancha el Chacho Coudet. Remató al arco, con fuerza y ganas, pero Fuentes, el arquero uruguayo, que logró evitar el gol pero dio rebote. Intentó Larrondo, pero la apertura del marcador la consiguió Fernández.
El dominio auriazul obligó a Cerro a extremar las marcas. A los 12 minutos, Larrondo recibió un golpe en la cabeza que obligó a parar el encuentro para el delantero reciba atención médica. Con el centrodelantero del equipo de Arroyito ya repuesto, pero con una en la cabeza, se reinicia el partido.
A los 14 minutos llegó la primera acción que llevó peligro al arco de Cerro. Montoya en una jugada veloz logró desbordar por derecha y mandó un centro milimétrico a Larrondo, quien tiró la pelota por encima del arco, cuando estaba en inmejorable posición para empujar el gol. Central se pierde el primero.
Larrondo protagonizó otra acción de riesgo e el arco oriental a los 26 minutos cuando obligó a Hernández a que lo cruce fuerte y le cometa penal. Herrera, el errático árbitro del encuentro, no cobró la falta. Fue el primer error de un juez que a lo largo de la primera mitad del partido cometió varios errores.