La vuelta al Gigante no estaba entregando la mejor versión de Central, que no encontraba los caminos para vulnerar al Gato Sessa. Iban 20 minutos del complemento y el partido se le estaba haciendo cuesta arriba. Pero cuando las ideas no aparecían y la razón comenzaba a nublarse en el canalla, apareció un regalito de los correntinos, y el canalla, que viene derecho en el torneo, no perdonó. Es que Sessa salió mal del área, el balón le quedó a Toledo que encaró derecho al arco y cuando ingresaba al área fue tocado desde atrás por Pérez, que le cometió penal. El Sapito Encina se paró frente a la pelota y definió con holgura para poner el 1 a 0, que hizo estallar el Gigante y al pueblo canalla.
Es que Central volvió a ganar y estiró la racha a diez partidos invictos y nueve triunfos consecutivos. Una victoria que le costó mucho a los canallas, que encontraron en Boca Unidos a un rival complejo y que le ofreció mucha más resistencia de lo que podía suponerse en la previa. Por eso es que los hinchas gozaron más este triunfo, que fue sufrido, más peleado que jugado, pero que tiene el plus de haber podido conseguir la victoria en el primer partido del año en el Gigante y que además le permite posicionarse como el único líder del torneo de la B Nacional, aprovechando que Olimpo perdió 1 a 0 en su visita a Defensa y Justicia.