Central puso actitud y fútbol y se dio un gustazo grande en la 11 fecha del Clausura. Con la
victoria ante River por 2 a 1, bajó al puntero, le sacó el invicto y encima salió de la promoción.
Buonanotte abrió el marcador para la visita, pero Zelaya y Arzuaga lo dieron vuelta.
En el comienzo del partido, Central hizo mejor las cosas. Con mucha actitud dominó las
acciones hasta el minuto 19, cuando apareció Buonanotte, quien con un remate cruzado venció a
Alvarez y puso en ventaja a los millonarios.
Los canallas acusaron el golpe pero no se dieron por vencidos. Con Jesús Méndez como
banderado, el equipo de Madelón siguió siendo más ambicioso y tuvo su premio justo cuando River se
perdía el segundo a través de Abreu.
A los 29, Méndez cedió para Zelaya, quien sacó un violento disparo que entró junto al palo de
Carrizo. Fue desahogo en el Gigante y respiro para Central. El gol llegó en el momento justo,
cuando llegaba la desazón tras tantos intentos fallidos.
Central siguió siendo más y a los 43 Arzuaga coronó una de las mejores jugadas colectivas del
partido. Méndez (cuándo no) la cambió para la entrada de Costa, quien de aire la mandó al corazón
del área, el colombiano la dominó ante la marca de Villagra y de media vuelta sacó el zurdazo que
infló la red.
En el segundo tiempo, Central arrancó igual y los millonarios iban pero sin lastimar.
A los 15, otra vez Papa trepó por izquierda, combinó con el Kily, quien cedió para Zelaya,
que no pudo definir casi debajo del arco.
Simeone movió el banco y se jugó todo a la igualdad. Entraron Ortega, Rosales y Archubi y
River quedó con 3 en defensa y con 5 en ataque, pero Central de contra llevaba peligro.
En el minuto 29, Borzani dejó la cancha tras ver el segundo cartón amarillo y allí sí cambió
el ritmo del partido.
River arrinconó a Central pero con poco peligro. Central se refugió contra su área y empezó a
rechazar todo.
Pasados los 40 se lo perdió Villagra de manera increíble, pero Central contestó y el Kily la
reventó contra la parte de afuera de la red.
Los minutos finales fueron emotivos, Carrizo fue dos veces a buscar en un córner porque River
llenó de centros el área canalla donde Ribonetto y compañía se hicieron patrones. En esos eternos
minutos hubo espacio para la contra, lo tuvo Papa y también Costa. Pero llegó el final, y el
estadio fue un solo grito de desahogo. Central bajó al puntero, le sacó el invicto, le marcó un gol
después de casi 600 minutos y encima salió de la zona de promoción. Domingo redondo para el pueblo
canalla.