
Domingo 17 de Agosto de 2014
Si hay canchas difíciles para un equipo no hay ninguna duda de que el Monumental de Núñez es una karma para Central. Porque al Canalla le cuesta horrores cantar victoria en la casa de River. El estadio millonario es una arena movediza para los de Arroyito. La estadística lo dice todo. Hace 14 partidos que los auriazules no doblegan a River como visitantes, con cinco empates y nueve derrotas. La última alegría guerrera fue hace casi 17 años, el 31 de agosto de 1997, cuando justamente bajo la dirección técnica de Miguel Angel Russo el score finalizó por 3 a 1 (dos goles de Rubén Da Silva y uno de Horacio Carbonari). Ese dato por sí sólo explica la complejidad de este escenario adverso para Central. Pero las rachas están para cortarse y con esa intención irán los canallas a intentar plantar la bandera del triunfo un territorio hostil.