Central no supo aprovechar el hombre de más y jugará la promoción

Estudiantes y Central igualaron sin goles en el estadio de Quilmes, donde el platense hizo las veces de local, resultado que no le sirvió a ninguno de los dos: el equipo platense se quedó sin la punta del certamen y el conjunto de Madelón deberá jugar la promoción.

Estudiantes necesitaba un triunfo y que Argentinos (que perdía con Independiente) no sumara para coronarse campeón del torneo Clausura, pero si bien el Pincha tuvo el monopolio del manejo de la pelota, no llegó con claridad en todo el partido.

Si bien fue Estudiantes el que tomó la iniciativa al comienzo del encuentro, las recurrentes imprecisiones de sus jugadores en los metros finales, le impidieron romper la igualdad. Central, mientras tanto, mostraba un libreto sencillo: se agrupaba en defensa y apostaba a la contra, a través de José Zelaya.

Las cosas empeoraron para el conjunto de Sabella con la expulsión de Juan Sebastián Verón, que no sólo dejó con diez a su equipo a los 31 del primer tiempo sino que tampoco estará en la definición del campeonato.

Recién cuando el Pincha quedó con diez hombres Central empezó a animarse y el primer tiempo terminó siendo más parejo, aunque ninguno de los dos pudo generar chances claras de abrir el marcador.

En el segundo tiempo, a los dos les costó más llegar al arco contrario y se hizo un partido con pocas emociones. En los últimos diez minutos, en Estudiantes no se notaba que jugaba con un hombre menos. Con poco fútbol pero mucho empuje, el equipo de Sabella hizo trabajar a Galíndez, que apareció cuando Central lo necesitó.

Estudiantes tuvo un poco más la iniciativa, pero eso no redundó en demasiado peligro para Galíndez. Es más, la primera jugada de gol para el equipo platense recién se produjo a los 31 minutos, cuando Galíndez le tapó un mano a mano a Boselli.

Sobre el final, Figueroa desperdició dos chances seguidas para Central. Primero de cabeza y después anticipando en el primer palo, pero la pelota se fue desviada.

Los rostros que inundaron la tribuna visitante tras el cuarto gol de Argentinos, el que determinaba la victoria del conjunto de La Paternal sobre Independiente, reflejaron la frustración de una hinchada que había ido a Quilmes a festejar una nueva consagración. La cual, al menos hoy, no se produjo.

Era el último manotazo. Central ahora deberá jugarse la permanencia en primera en la promoción.