“Sólo me falta hacer un gol en el clásico”. La confesión de Gonzalo Castillejos
llega después de su segundo gol oficial en primera división con la camiseta de Central. El atacante
canalla ya les marcó a River y Boca en su primer torneo y se anima a soñar con más. “La
verdad es que sería increíble hacerle un gol a Newell’s. Aunque mientras gane el equipo, no
importa quién haga los goles, sobre todo en el clásico. Yo voy a estar siempre al servicio del
equipo y ojalá que sigan viniendo los goles”, destacó ayer el artillero de las inferiores que
a fuerza de convicción y sacrificio se está ganado un lugar en el escenario mayor de los
auriazules. Sus dos gritos sirvieron para tumbar grandes en Arroyito y como todo delantero, no se
conforma.
“Es muy lindo hacerle goles a los equipos importantes. De los dos goles, me gustó más el
que le hice a Boca. Más que nada por la jugada. Cuando noté que podía pasar en velocidad a Monzón,
que es un jugador rápido, me sorprendí y me tuve fe. Cuando vi que se movió Abbondanzieri y dejaba
un hueco al lado del palo, le apunté al arco y por suerte se me dio”, relató Castillejos a
manera de cronología de un gol que nunca olvidará en su vida.
El domingo, después del partido, fue con su familia a cenar a un restorán de avenida Pellegrini.
Allí revivió el trascendente triunfo canalla y lo disfrutó con los suyos. “La familia sigue
siendo el primer sustento. Ellos siempre están, en las buenas y en las malas. Me sirvieron mucho
cuando las cosas no salían y por ahí se escuchaban algunos cuestionamientos”, contó
Gonzalo.
—¿Dolieron las críticas a los delanteros cuando los goles no aparecían?
—Es normal. Cuando no aparecen los goles, la gente y el periodismo se queja. Yo no me dejo
llevar por eso y trato de hacer las cosas bien para el equipo. A veces me salen las cosas, otras
no. Pero dejo la vida siempre y siento que los goles son como un premio a ese esfuerzo.
—Cuando la mano venía torcida te tocó estar afuera, ¿cuál fue la receta para no
bajonearte?
—Yo valoro mucho este momento. Me tocó pasar por esto a los 23 años y no le doy demasiadas
vueltas. Trato de disfrutarlo y dejo todo en cada partido. Por eso soy tranquilo, sé que las cosas
se me van a dar de a poco.
—¿Imaginabas goles a River y Boca en tu primer torneo?
—Un delantero siempre se ilusiona con goles importantes.
—¿Te desvelan los goles?
—Nosotros estamos en una situación en la que sólo tenemos que sumar. No importa quién sea
el que haga los goles. Hay que llegar a los 30 puntos. Mientras ganemos, que los haga
cualquiera.
—Sólo te falta un gol en el clásico.
—Sólo me falta eso, sería increíble hacer un gol en el clásico. Pero estoy tranquilo,
todos los partidos salgo con la misma mentalidad. Ojalá me sigan saliendo las cosas bien.
—¿Te pusiste una meta de goles para este torneo?
—Todos los que pueda. Los goles tienen que ver con los momentos. Ojalá pueda hacer cinco,
seis, ocho, o diez. Yo estoy para colaborar y pienso en el equipo.
"No hay que relajarse"
La vibrante victoria ante Boca elevó el promedio canalla, dejó a
Racing un punto abajo y estabilizó la balanza de disputa con Gimnasia y Esgrima La Plata. Pero este
presente alentador no tiene margen para las licencias y los jugadores canallas lo saben. “Es
que nosotros tenemos que seguir con la misma mentalidad. No hay que bajar los brazos ni relajarse
en este momento. Venimos bien, pero esto es muy largo”, recalcó Castillejos.
“Haciendo un balance, arrancamos muy lejos de Racing y Gimnasia,
y ahora ya lo superamos a uno y estamos igual que el otro. Estamos muy conformes con eso. Ya
tenemos 20 puntos en el torneo, una cantidad muy saludable. Y lo más importante es esa diferencia
que achicamos. Ahora nos quedan siete partidos, 21 puntos y hay que sacar la mayor cantidad
posible”, agregó el punta auriazul.
—¿El objetivo sigue siendo llegar a 30 puntos?
—Al principio del torneo sí. Pero achicamos tanto la diferencia
que con 27 o 28 puntos creo que igual podemos sacar una ventaja importante.
—Con esos puntos también se pueden acercar a la Copa. ¿Para que
está Central?
—Está para sumar. Después, al final del torneo, vamos a ver
dónde estamos parados.