Carozo tiene la base definida para que Newell's debute ante Boca

No hubo sorpresas. Por lo menos eso es lo que sucedió ayer cuando Gustavo Raggio plantó en el Coloso Marcelo Bielsa el once principal que tiene en mente para el debut el domingo frente a Boca. Cristián Díaz apareció en el sector izquierdo de la defensa y Martín Tonso completó el tridente ofensivo. Después hubo modificaciones y pruebas que introdujo el DT, que recién hoy tras la práctica matutina entregará algunas precisiones. Aunque, claro está, difícilmente confirme con tanta anticipación la formación y aguardará hasta el mismo día del encuentro para hacerlo teniendo en cuenta que faltará una práctica más. Por eso la puerta sigue abierta a alguna variante de última instancia.

Nueve de once futbolistas estaban y están prácticamente confirmados, más después de la habilitación que llegó ayer de Ignacio Scocco. La cuestión o duda pasaba por el reemplazante del lesionado Milton Casco, aunque en esa carrera por la titularidad el Kichu es el candidato y el que iba a estar si el torneo arrancaba el fin de semana pasa do. Llegó Corvalán como la última incorporación para pelear el lugar. De todas formas, el DT le respetaría el lugar al defensor surgido de las inferiores.

En el ataque apareció Tonso, ya recuperado de algunas dolencias que arrastraba, y se perfila para ser de la partida frente a los xeneizes acompañando a Nacho Scocco y Maxi Rodríguez.

Después Carozo fue probando y metiendo algunos otros futbolistas, como el caso del juvenil Mauricio Tevez, por el cual hay muchas expectativas y posiblemente esté en el banco de suplentes (ver aparte). También apareció en escena Víctor Figueroa, quien dejó atrás la lesión en el sóleo que retrasó su preparación y de no mediar ningún imprevisto también ocupará un lugar entre los dieciocho.

En cuanto al esquema será el mismo de siempre, o sea 4-3-3 teniendo en cuenta que no habrá posiciones fijas si no que se van modificando de acuerdo a la circunstancia del encuentro. Todos tendrán la premisa de presionar y ayudar a la hora de la recuperación de la pelota.