Suele decirse que "una cosa trae la otra". En algo de esa idea buscó Mauricio Caranta las explicaciones de lo que fue el empate del sábado frente a Lanús. En la consecuencia de estar siempre pensando en el arco ajeno. Y básicamente la forma en la que transcurrió el juego, que obligó al arquero canalla a transformarse en la figura indiscutida del encuentro. Después, cada análisis depende de la subjetividad que se le imprima y quién se la imprima. "Fue bueno", tiró en relación al juego exhibido, amén de que otros lo analizaron de otra manera (ver aparte). ¿Palabras de ocasión? No parecieron. Es que para el experimentado jugador todo fue producto de una actitud que parece innegociable, como es la de "presionar bien arriba".
"Necesitábamos ganar de local y no lo pudimos hacer. Arrancamos perdiendo y otra vez se nos hizo difícil. De nuestra parte está siempre la misma propuesta, la de salir a buscar el partido. Es lo que intentamos hacer, pero esto es fútbol. Lanús hizo bien las cosas pero me quedo con el rendimiento del equipo", argumentó Caranta sin titubeos y, si se quiere, sin terminar de advertir, tal vez por la intención de no poner su nombre por encima del resto, que fue de los jugadores canallas que más trabajó durante los 90 minutos. Al menos al que se le presentaron un par de intervenciones al límite.
Desde ese análisis, tan lineal como real, cuando un arquero es figura es porque la estructura en algo falló. Pero Caranta fue por otro camino. Por el de intentar apuntarle a la mitad del vaso lleno. "Me quedo con el funcionamiento y también con las ganas de salir a buscar el partido porque teníamos con qué. Creo que en algún momento lastimamos, pero nos faltó otro poco y no pudimos", dijo.
—Por lo que decís fue de lo mejor que hizo Central en cuanto a funcionamiento.
Creo que fue bueno. Me parece que la entrega del equipo fue muy buena, yendo a buscar el partido en todo momento porque teníamos con qué. Hicimos todo para ganarlo pero no se pudo.
—¿Y desde qué lado explicás que Lanús haya tenido tantas situaciones claras?
¿Por qué pasó eso? Porque fuimos a buscar al partido en todo momento, que es lo que pretendíamos. Así llegó el empate y lo seguimos buscando, aun con más desorden porque sumamos más gente arriba y quedábamos mano a mano atrás. Esos son los espacios que se generan. Es fácil para el que viene o sería fácil para nosotros esperarlo en el borde de nuestra área y jugar de contra porque tenemos un montón de jugadores rápidos, pero esta vez lo fuimos a buscar muy arriba y eso hace que en el fondo se abran espacios.
—¿La parte defensiva también te gustó?
Lo que pasa es que fuimos a presionar muy arriba y cuando vos presionás muy arriba es lógico que se generen espacios y el gol viene así, con nosotros muy arriba y con un pelotazo que peinan en tres cuarto. No es que vino con una jugada generada por alguna de las bandas, sino por un par de rebotes.
—Entonces ponderan al punto.
Sí. Esta es el partido 15º que Central no pierde. Hubiésemos querido ganar porque jugábamos de local, con nuestra gente y porque teníamos la posibilidad de alcanzar la punta, pero no se pudo pese al gran esfuerzo que hicimos.
—¿Lanús es de los rivales más complicados que les tocó enfrentar hasta aquí?
Sí, por la jerarquía de los jugadores, por un técnico que es muy inteligente, desde plantearlo tácticamente hasta fuera de la cancha. Lanús es un equipo con mucho oficio, que desde hace unos cuantos años viene jugando copas internacionales. Estos jugadores pueden ser chicos pero la mayoría tienen ya muchos partidos internacionales encima. Por eso creo que sacamos un punto importante.