Campeones de la Davis futbolera

No importa el lugar del mundo en el que esté: siempre que puede Juan Martín Del Potro pone en primer plano los colores de Boca. Fanático del equipo xeneixe y asiduo visitante de la Bombonera cuando el circuito se lo permite, La Torre de Tandil recibió varios reconocimientos en el club de sus amores. Pero ayer se llevó una ovación especial, inolvidable, en el marco del hecho histórico que protagonizó hace sólo unas semanas, cuando ganó junto al equipo argentino la bendita Copa Davis.

Delpo, flamante héroe y campeón en Zagreb en la final ante Croacia, compartió con los hinchas de Boca la obtención de la Ensaladera de Plata cuya réplica en escala mostró en el campo de juego de la Bombonera. Y apenas pisó el césped del mítico estadio bajó de los cuatro costados el estruendoso "olé, olé, olé, Delpó, Delpó", clásica arenga también para cuando Juan Martín disputa competencias trascendentales, como la propia Davis o como los Juegos Olímpicos, donde el público extranjero quedaba asombrado ante esta situación.

De los jugadores que obtuvieron la Copa Davis, tres de los que estuvieron en la final, son hinchas de Boca: ya habían sido homenajeados el azuleño Federico Delbonis y el correntino Leonardo Mayer. Faltaba el As, Delpo, la mejor raqueta argentina. Y tuvo su momento ayer.

Lo mismo sucedió en otras canchas con los otros campeones del equipo: Guido Pella, quien también dijo presente en Zagreb y el rosarino Renzo Olivo, campeón por haber estado en una de las series que construyeron el camino al título. El Ilusionista, fanático de Newell's piso el césped del Marcelo Bielsa en la goleada de ayer ante San Martín de San Juan, en el entretiempo en el que además regaló pelotitas a la tribuna.

Pella, fanático de Olimpo, recibió su ovación en Bahía Blanca en la previa del partido con River.

En tanto, el otro domingo, en el Monumental y en el marco del Súper Clásico había sido el momento de la ovación de los millonarios del equipo: el capitán Daniel Orsanic y Carlos Berlocq.

Pero el punto saliente estuvo en Boca, con la satisfacción de Delpo en una jornada que también podría ser histórica por la despedida de Carlos Tevez (aceptaría la oferta de China). La Ensaladera, a esta altura, es bien futbolera.