Roberto Pompei no quiere hacer mucho ruido. Esa es la receta que viene utilizando desde que se
convirtió en el técnico interino de Boca. Y volvió a dar un claro ejemplo de su manera de actuar.
Anoche se mostró modesto y solidario al insistir con que la dirigencia lo llamó en su momento
“por seis partidos”. También dijo que aspira a poner al club en una posición
“decorosa” en la tabla de posiciones y que colaborar con Carlos Bianchi sería como
hacer “un posgrado”.
Además de ratificar su predisposición para colaborar con el club dónde se lo necesite, Pompei
mantuvo una postura equilibrada sin ningún tipo de exceso, a pesar de que su equipo le ganó el
clásico a San Lorenzo por 2-0 en La Bombonera, por la 16ª fecha del Clausura.
“En el arranque del segundo tiempo, San Lorenzo tuvo la pelota y se colocó en posición
de ataque. Pero la verdad es que fueron sólo quince minutos y nunca llegaron a crearnos situaciones
de gol”, comenzó por analizar.
Y continuó: “El equipo supo pasar ese momento y después retomó el control del partido.
Metió el segundo gol y creo que a partir de ese momento fue todo de Boca”.
El DT también explicó cómo pensó el partido cuando Sebastián Méndez dispuso la entrada de
Juan Carlos Menseguez en San Lorenzo en la segunda etapa.
“En ese momento pensé que se nos iban a venir, pero que tendrían menos la pelota",
aseguró.
Además, contó que "Nico (Gaitán) sufrió un golpe en la rodilla al principio del partido.
Tuvimos dos o tres situaciones por la derecha, donde él que normalmente llega al fondo, pero no
pudo terminar de encarar”.
Aclaró que demoró el reemplazo del lesionado para evitar tan temprano una variante, ya que
sabían que “era un golpe y no algo importante”.
Sin misterios también precisó que buscó cuando colocó a Pablo Mouche.
“Lo puse para que hiciera todo lo que estaba haciendo Nico en ataque y que colaborara
un poquito con la salida. El segundo gol es el que marca el final del partido porque desde ese
momento empezamos a tener la pelota de tres cuartos de cancha para adelante”, sostuvo el
Pompei, que está ofreciendo síntomas favorables, pero se aferra al perfil bajo.


























