Parece que en Boca no reparan en el momento que atraviesa el equipo. Todo indicaría que poco importa que el Xeneize se ubique en el lote final de la tabla de posiciones y que acumule dos derrotas consecutivas (ante River y Central). Esto se debe a que el entrenador Carlos Bianchi y el presidente Daniel Angelici se reunieron ayer en las oficinas del predio de Casa Amarilla para comenzar a analizar la conformación del plantel en el próximo semestre, según señalaron allegados al cuerpo técnico del club.
Como si el equipo no necesitara trabajo para salir de su flojo presente, el cónclave, que fue acordado por el DT tras la derrota en el Gigante de Arroyito, se realizó mientras los jugadores realizaban movimientos físicos en una de las canchas del predio Pedro Pompilio, antes de practicar fútbol en espacio reducido.
Si bien no hubo información oficial del club sobre la reunión, allegados al cuerpo técnico señalaron que Angelici reiteró el respaldo y la decisión de la dirigencia boquense para que Bianchi siga al frente del equipo.
En lo estrictamente futbolístico, Juan Román Riquelme, rápidamente repuesto de una dolencia que le impidió jugar ante Central, se entrenó a la par de sus compañeros y todo indica que el domingo será titular ante Godoy Cruz en La Bombonera.
El ayudante de campo José Castro dio la charla en el entrenamiento después de un partido, ya que Bianchi se encontraba reunido con Angelici al momento de comenzar la práctica.
Para el duelo con el Tomba el Virrey tiene una duda en el mediocampo: Nicolás Colazo o Juan Sánchez Miño.
El posible equipo: Agustín Orion, Hernán Grana, Daniel Díaz, Juan Forlín y Emanuel Insúa; Fernando Gago, Pablo Ledesma, Nicolás Colazo o Juan Sánchez Miño; Juan Román Riquelme; Juan Manuel Martínez y Emmanuel Gigliotti.
