La anécdota que tantas veces relató Gabriel cuenta que se había colado a un cumpleaños de 15 para ir detrás de los pasos de Irina, quien fue su primera novia y luego su esposa.
Como todos los matrimonios, ambos pasaron por muchos momentos duros y tuvieron que superar dificultades y crisis, como cualquier matrimonio, afirma Crónica. La más recordada fue aquel festejo del Bati cuando, jugando para la Fiorentina frente al Milán en 1996, gritó a la cámara "Irina, te amo", en un festejo de gol totalmente desaforado.
Según informó el matutino, el Bati, que durante años fue elegido el jugador más lindo, ya habría iniciado un romance con una mujer más joven.