Arsenal, el humilde club de Sarandí fundado entre otros por el presidente de la AFA, Julio Grondona hace 55 años, se consagró campeón de la máxima categoría del fútbol argentino por primera vez en su historia, al vencer a Belgrano.
Arsenal, el humilde club de Sarandí fundado entre otros por el presidente de la AFA, Julio Grondona hace 55 años, se consagró campeón de la máxima categoría del fútbol argentino por primera vez en su historia, al vencer a Belgrano.
El equipo dirigido por Gustavo Alfaro había arribado a la última fecha liderando la tabla de posiciones junto a Tigre, pero el Matador empató con Independiente en Victoria.
Belgrano terminó en inferioridad porque fueron expulsados Lollo y Claudio Pérez, a los 56' y a los 90'.
Con el juego colectivo vertical y directo que lo caracteriza, el conjunto local fue superior desde el inicio a un rival especulativo que fue a Sarandí sin mayores aspiraciones.
Si bien estuvo lejos de su mejor rendimiento, y después de obtener la ventaja bajó su nivel, apeló a su solidez defensiva para llegar al título.
La primera llegada peligrosa fue a los 3', tras un tiro libre de Leguizamón, al capturar Zelaya un rebote y disparar cerca de un palo.
La reacción del conjunto cordobés se produjo a los 13', en un contragolpe aislado de Melano, pero Campestrini logró desviar el tiro al córner en el último instante posible.
A los 27', Leguizamón ejecutó un córner desde la derecha al corazón del área, donde Lisandro López fusiló al arquero rematando de aire, espectacularmente.
El trámite del encuentro cambió radicalmente después del gol porque Alfaro replegó la formación en el propio campo y le dio la pelota a Belgrano con la intención de hallar más espacios de contra.
Sin embargo, esto deparó tan sólo una lucha desprolija en el mediocampo que favoreció al visitante, ya que estaba más cerca de la meta contraria. Así y todo, le faltó claridad en los últimos metros y Arsenal pudo haber ampliado la diferencia a los 63', cuando el volante colombiano Carlos Carbonero forzó la intervención de Juan Carlos Olave pateando con veneno desde fuera del área.
A sabiendas del resultado parcial del choque entre Tigre e Independiente, que se jugó simultáneamente, el cuerpo técnico y todos los suplentes aguardaron ansiosos al borde de la cancha el final, y con el sonido del silbato abrazaron la gloria.