La selección argentina jugaría con todo su poderío ofensivo, integrado por Lionel Messi, Sergio Agüero y Gonzalo Higuaín, frente a Uruguay, en una nueva jornada de las eliminatorias mundialistas. “Es probable”, admitió el entrenador Alejandro Sabella, al ser consultado por la formación que pondrá el viernes próximo en Mendoza.
En ese sentido, el seleccionador añadió en declaraciones radiales que “(Angel) Di María también es fundamental” en el andamiaje ofensivo del equipo.
Tal como había ensayado en la práctica del martes, Sabella ratificó hoy su idea en distintos trabajos tácticos realizados en el predio de Ezeiza. En el caso de Agüero, retornaría a la titularidad ya recuperado de una lesión, en lugar de Ezequiel Lavezzi, quien sufrió un desgarro.
La alineación para jugar con Uruguay el próximo viernes iría con Sergio Romero; Pablo Zabaleta o Hugo Campagnaro, Federico Fernández, Ezequiel Garay y Marcos Rojo; Fernando Gago, Javier Mascherano y Di María; Agüero, Higuaín y Messi.
Por lo tanto, Sabella repetiría el mediocampo y el ataque con el que goleó 4-0 a Ecuador en el estadio Monumental, en una de las mejores producciones de los últimos tiempos.
El plantel albiceleste viajará mañana rumbo a Mendoza, sede del encuentro contra Uruguay, y retornará a la Capital luego del encuentro. De todas formas, los jugadores seguirán concentrados ya que el martes próximo el equipo se enfrentará a Chile, como visitante, en otra jornada de eliminatorias.
El elenco albiceleste encabeza la tabla de posiciones con 14 puntos, seguido por Colombia y Ecuador, ambos con una unidad menos.
El entrenador nacional, Alejandro Sabella, remarcó hoy que una victoria contra Uruguay acercaría a su equipo al objetivo, que es clasificarse para el Mundial, y “dejaría hechos positivos más allá de los tres puntos”.
“Si ganamos le sacaríamos más ventaja a Uruguay, como es obvio, y después tenemos que enfrentarnos con los otros equipos que vienen atrás, como Colombia y Venezuela”, afirmó. Asimismo, admitió que en caso de ganar, “hasta podríamos permitirnos algún tropiezo en el tramo final del torneo, pero ojalá no ocurra”.
En declaraciones a radio del Plata, el director técnico confió que vive esta etapa “con moderado optimismo”, ya que el equipo alcanzó una buena racha de seis victorias consecutivas, que se cortó con el empate ante Perú y la derrota en el primer Clásico de las Américas frente a Brasil, en el que actuaron futbolistas del medio local.
Con miras al clásico frente a Uruguay, indicó que “no importa mucho como llegan, en general, al equipo que viene mal le cuesta reponerse ante la adversidad, y al que viene bien le ocurre lo contrario”. “Sin dudas, se trata de dos equipos aguerridos, con mucha fuerza, con grandes jugadores, Conozco bien a los muchachos de Uruguay, están muy unidos y convencidos del objetivo”, añadió. Sabella acompañó a Daniel Passarella cuando éste condujo a la selección uruguaya, entre 2000 y 2001.
Por otra parte, Sabella desmintió los rumores sobre un supuesto alejamiento: “Le vamos a dar entidad a algo que no lo tiene, pero me considero una persona honesta y si yo tuviera algo que me distraiga del trabajo, estaría defraudando a las personas que me nombraron, a los jugadores y al público argentino. No tengo nada, estoy bárbaro de salud. Cumplo mi trabajo y quiero clasificar al Mundial”, concluyó.