El presidente de la Fifa, el suizo Gianni Infantino, de visita por primera vez en Buenos Aires, señaló ayer que la Argentina "debe ser un ejemplo y tanto la nueva Fifa como la Conmebol necesitan una AFA fuerte". Las declaraciones las hizo en el marco de la exposición que efectuó a los medios de prensa en la sede de la calle Viamonte. Infantino tomó la palabra luego de los presidentes de AFA y Conmebol, Claudio Chiqui Tapia y Alejandro Domínguez, respectivamente, y en una resumida pero concisa exposición expresó su simpatía por nuestro país y la confianza que tiene en esta nueva gestión.
"Argentina, desafortunadamente, la pasó un poquito mal desde el punto administrativo, al igual que todo el continente y que la propia Fifa. Eso lo sabemos todos. Pero un país como Argentina tiene la fuerza y la pasión para empezar a trabajar en serio por el desarrollo del fútbol. Tiene que ser así", manifestó el suizo frente a la dirigencia del fútbol argentino, invitados especiales y representantes de los planteles campeones del mundo en 1978 y 1986.
Precisamente, durante el saludo, Infantino mencionó a Diego Maradona, con quien tiene una gran relación, y le envió "un abrazo desde su país". "Siento emoción por estar en la ciudad donde se escribieron muchas de las páginas más emocionantes de la leyenda del fútbol", remarcó.
"La AFA puede hacer mucho por el fútbol mundial y también debe ser un ejemplo. No sólo por los jugadores, como (Lionel) Messi, sino también por lo que hace su liga, los clubes y los hinchas", insistió el presidente de Fifa. "Son argentinos y tienen que estar orgullosos de serlo", arengó Infantino, quien también bromeó con Tapia sobre la "pasión" con la que se vive el fútbol argentino.
"Hasta el agua es albiceleste", resaltó, entre las risas de los presentes.
Previamente, Chiqui Tapia abrió la exposición con agradecimientos a Infantino y al paraguayo Domínguez por la visita en un "día especial para el fútbol argentino". "Para la reconstrucción de nuestro fútbol su presencia es importantísima", le confesó Tapia a Infantino antes de poner a la AFA "al servicio del fútbol mundial".
Luego tomó la palabra el mandatario de la Conmebol, Alejandro Domínguez, quien calificó a nuestro país como "la catedral del fútbol mundial". "Cuando uno recorre el mundo conoce muchos templos del fútbol, pero cuando uno viene a la Argentina sabe que está en la catedral del fútbol mundial", elogió.