La boxeadora argentina Marcela La Tigresa Acuña, campeona mundial versión AMB,
venció en la madrugada de ayer y en fallo unánime a la brasileña Adriana Salles, en una pelea sin
título en juego realizada en el balneario uruguayo de Punta del Este y que tuvo un final
insólito.
La argentina ganó un combate que tuvo un final confuso, ya
que terminó en el octavo asalto, cuando inicialmente se había anunciado a 10.
Los jurados vieron ganar a la formoseña por 79-77, 78-77 y
77-76.
De acuerdo a lo expresado por Acuña, que ahora tiene un
récord de 27 victorias —14 por la vía rápida— y 5 caídas, en el contrato que firmó ella
indicaba que la pelea estaba pactada a 10 rounds.
Sin embargo, el entrenador y los ayudantes de la brasileña,
que quedó con un palmarés de 9 triunfos (tres por nocaut), tres derrotas y un empate, argumentaron
que en el contrato de Salles figuraba a ocho vueltas esta pelea.
En tanto, el fiscal del combate, Hugo de León, informó
posteriormente que la pelea se había acordado a diez asaltos y no a ocho como finalmente
ocurrió.
Algo insólito, pero real, teniendo en cuenta que fue un enfrentamiento entre
boxeadoras profesionales. Al fin y al cabo, Acuña ganó sin discusiones.
Por su parte, el campeón mundial Omar Narváez fue recibido ayer por el
gobernador de Chubut, Mario Das Neves.
Das Neves destacó que el triunfo de Narváez ante el colombiano Carlos Tamara le da un nuevo
impulso al deporte chubutense en el escenario internacional. l