Villa Constitución.—
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Con 1.666 votos, la lista Azul, que propuso a Héctor Ibarra como secretario general de la UOM local, se impuso en las últimas elecciones a la histórica lista Marrón, que obtuvo 1.012 votos. Los comicios formaron parte de las elecciones nacionales del gremio y esta seccional fue una de las pocas del país donde se presentó más de una lista.
La lista Azul, encabezada por Ibarra y Sergio Pisanell, se alineó con la Central de los Trabajadores Argentinos (CTA) que a nivel nacional conduce Hugo Yasky y tuvo como referente en esa central al secretario de Relaciones Exteriores, Victorio Paulón, un histórico protagonista del "Villazo" de 1974 y ex integrante de la Marrón, agrupamiento con el que rompió lanzas en 2008. La lista Marrón es hoy afín a la CTA disidente de Pablo Micheli, y una tercera agrupación, la Verde y Negra logró 395 sufragios, estimándose la participación en los comicios de un 75 por ciento del padrón.
Cuando el 30 de septiembre venza el mandato del actual secretario Juan Actis y asuman Ibarra y su gente, ya no quedará en la dirección de la UOM villense ningún protagonista de las jornadas de marzo de 1974.
"Empecé en el 82 y viví el regreso de los dirigentes de los 70 que estuvieron presos, las marchas y las derrotas como la del 2008 que luego asimilamos y que convertimos en esto", recordó Ibarra a LaCapital.
Manejos distintos.El dirigente, de larga militancia en Acíndar consideró que su gestión deberá adaptarse a las nuevas formas del trabajo gremial. "Hoy los trabajadores y las empresas tienen manejos distintos y a la palabra negociación hay que incorporarla porque en esta época no tiene necesariamente sentido negativo si tenemos en claro nuestros objetivos", indicó.
El dirigente también destacó la importancia de "juntar relaciones de fuerza favorables" para las discusiones, y de las recientes elecciones rescató la lucha de los militantes de la lista, quienes, señaló, debieron enfrentar todo tipo de trabas y acciones del oficialismo para intentar reducir el padrón de votantes atribuyéndole además a la lista perdidosa en los comicios el haber impulsado la creación de la lista Verde y Negra que sólo obtuvo 395 sufragios.
Tras desechar que exista la más mínima posibilidad de que su seccional integre la mesa del secretariado nacional metalúrgico, Ibarra hizo referencia a la situación de los trabajadores de Paraná Metal, una fábrica sobre la que consideró que "no aumentará su demanda de mano de obra si no consigue volver a producir blocks de motores y recuperar a sus clientes".
Ibarra rescató la línea política de la CTA que conduce Hugo Yasky. "No somos complacientes con el gobierno; nos mantenemos en nuestra independencia y críticos. Estamos contra el pago de ganancias y creemos que los trabajadores tenemos mucho por lo que seguir luchando, pero hay un crecimiento industrial evidente, los metalúrgicos tenemos trabajo, hemos discutido nuestras paritarias".
El referente. El referente de Ibarra en la CTA-Yasky, Victorio Paulón, destacó que "la diferencia de votos entre las dos principales listas superó los 22 puntos". Paulón coincidió con Ibarra al criticar el accionar de la lista oficialista, que intentó siempre desalentar el voto exigiendo a los trabajadores que votaban en fábrica el DNI".
Paulón consideró que un factor decisorio del resultado fue que el mayor apoyo logrado por la lista Marrón provino del padrón de jubilados y en menor medida de trabajadores activos. "Pero lo que hay que destacar es que en la UOM de Villa sigue habiendo democracia sindical y participación. Sólo en tres seccionales del gremio hubo elecciones; en las otras 49 hubo lista única Otra cosa importante es que todo lo que ocurre en nuestra UOM suscita interés por el peso de la actividad metalúrgica de una ciudad, que vive de la masa salarial de las quincenas de sus trabajadores.
Diferenciación. Paulón, se diferenció de manera traumática en 2008 de la lista Marrón "Esa confrontación tenía que ver con un acuerdo por el que sosteníamos que, para que los dirigentes no se eternizaran en los sillones, tenían que jubilarse a los 65 años como cualquier compañero trabajador. Por eso nos diferenciamos de Alberto Piccinini; ahí se fracturó la Marrón", recordó.
Reflexionó luego el dirigente sobre el recordado conflicto en Paraná Metal. "Quedó la impresión de que fue conducido con impericia. Se prolongó demasiado y no se entendía que lo fundamental era la preservación de la fuente de trabajo. Hoy se trata de recuperar esa producción, En ese momento hubo un costo político y hoy allí perdió la Marrón y ganó la Azul".