Luego de la reunión conciliatoria efectuada el viernes último en la sede del Ministerio de Trabajo santafesino, las partes en conflicto ?la Comuna de Cañada Rosquín y los trabajadores comunales- acordaron retrotraer la situación y se suspendió el paro iniciado el 11 de abril. El acuerdo incluyó mejoras para los empleados como pase a planta, restitución del otorgamiento tareas de conducción y pago de descuentos efectuados por los días que duró el conflicto.
La audiencia de conciliación se desarrolló entre los representantes gremiales de los trabajadores y autoridades de la comuna rosquinense. De esta forma se puso en suspenso el conflicto que duró más de 20 días. A partir de este lunes los comunales volvieron a cumplir con su jornada laboral, pero se estableció que el 20 de mayo continuarán las negociaciones entre las partes en una reunión a realizarse en la comuna y que “la tregua” tiene un alcance de tres meses, lapso en el cual deberán encontrar las soluciones definitivas al problema.
Durante la reunión en Trabajo se procedió a analizar la situación y los reclamos que impulsaron la medida de fuerza y desde el Sindicato de Trabajadores Municipales (Sitram) explicaron que “se obtuvieron mejoras para los trabajadores”.
El delegado gremial de Sitram, Luis Strumia, indicó al portal Posta Rosquín que “todo llegó a un buen término. Para resumir, se hace la devolución de presentismos y días descontados que se habían quitado por el paro a los empleados. Además, el agente que debía pasar a planta permanente lo hará”.
El acuerdo fue rubricado por el coordinador de Delagaciones, Inspectorías y Rurales del Ministerio de Trabajo, Carlos Bastián; el presidente comunal de Cañada Rosquín, Ulises Puntonet, y Martín Bocassi; el secretario general de Sitram Las Rosas, Claudio Gómez, y el secretario de finanzas de Sitram, Luis Strumia. También participaron los representantes de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales (Festram), Ignacio Monzón, Mauricio Herzog y Germán Ocampo, y los abogados representantes de las partes y otros delegados gremiales.
De acuerdo al acta rubricada “luego de un prolongado intercambio de opiniones, las partes manifiestan que mantienen sus posturas iniciales respecto a los puntos del conflicto”. Sin embargo y “a los fines de instrumentar una senda de diálogo entre las partes, teniendo en cuenta los intereses sociales en juego, el necesario restablecimiento de la paz social como herramienta fundamental para acercar posiciones y formular acuerdos que den respuesta a los reclamos laborales” se propuso que “se retrotraiga la situación fáctica y las relaciones laborales al estado anterior a la existencia del conflicto”. Esto permanecerá así “por un tiempo razonable, en consonancia con los efectos propios de la conciliación obligatoria”. Es decir que el compromiso estará vigente durante 90 días y que ante cualquier acción que tome tanto la parte comunal como la sindical deberá solicitarse la intervención del Ministerio de Trabajo.
En consecuencia, la comuna manifestó su compromiso “al pase a planta permanente del agente Marcelo Romero, dejando en claro que su pase ya se encuentra en proceso de ejecución con la resolución aprobada por la comisión comunal”. También se restituyó el otorgamiento de las tareas de conducción a un agente comunal y el Ejecutivo rosquinense se comprometió además a “proceder a partir del 10 de mayo al pago de los descuentos efectuados con motivo de la medida de fuerza”.
Por su parte la representación sindical accedió a levantar el paro, incluyendo la remoción de la carpa erigida frente al edificio comunal, así como a solicitar a los trabajadores un esfuerzo para restaurar en el menor tiempo posible los servicios interrumpidos.
Ambas partes se comprometieron a “establecer un ámbito de diálogo directo para destrabar y normalizar los restantes puntos que fueran objeto del reclamo” y al respecto se acordó una primera reunión para el 20 de mayo en la sede comunal.