El intendente de Villa Gobernador Gálvez, Alberto Ricci, cuestionó este martes los hechos de violencia acaecidos en esa ciudad en los últimos días en una carta abierta en la que expresa: “Repudio todos los hechos de robos, balaceras y amedrentamientos que se vienen dando en nuestra ciudad, tanto a vecinos como a comerciantes. A todos ellos, nuestra solidaridad y respaldo para que pronto se esclarezcan los hechos y que los responsables sean encontrados, juzgados y encarcelados”. Ya son varios los reclamos que elevó Ricci a las autoridades ante la situación de inseguridad que se vive en la ciudad.
La reacción del mandatario local se da a pocas horas de que el concejal y ex intendente Jorge Murabito sufriera un ataque a su domicilio, que fue baleado la madrugada de este lunes. La vivienda del precandidato a renovar su banca por el Frente Renovador, ubicada en Belgrano 2073, fue atacada a las 4.10. En el lugar se secuestraron tres trozos de plomo.
Ricci advirtió que “la situación que vivimos como autoridades, y también como vecinos de la ciudad, una vez más nos impulsa a reiterar el pedido de mayor atención, compromiso y dedicación por parte de los gobiernos provincial y nacional para profundizar la presencia policial en las calles, estrategia e inteligencia criminal que permitan prevenir los delitos complejos que vienen sucediendo cada vez más seguido”.
En este sentido, el intendente villagalvense sostuvo que “como municipio, el tema no nos pasa por al lado, estamos poniendo a disposición todos nuestros recursos, intensificando operativos de control, incorporando cámaras de videovigilancia, y trabajando de forma articulada junto a la Comisión de Apoyo a la Seguridad, legisladores provinciales, concejales de la ciudad y demás instituciones. Pero sabemos que esto no alcanza; es fundamental que en nuestra ciudad tengamos mayor presencia de fuerzas de seguridad, tanto provincial como federal; una Justicia con recursos a la altura de lo que Villa Gobernador Gálvez necesita".
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El mandatario advirtió que la Fiscalía local trabaja "a destajo" y no da abasto ante la cantidad y complejidad de los delitos que ocurren "y que nos tienen sin paz; pero sobre todo exigimos un verdadero plan de seguridad integral sostenible en el tiempo, que contemple a nuestra ciudad para así proteger la integridad de nuestros vecinos villagalvenses”.
No es la primera vez
No es la primera vez que las autoridades de Villa Gobernador Gálvez elevan un reclamo ante la inseguridad que vive la ciudad, y todo hace pensar que no será la última.
Tal como lo publicó La Capital el 18 de marzo de este año, con la firma de 120 instituciones, autoridades, comerciantes y vecinos, el intendente Ricci pidió por aquellos días una audiencia con el entonces ministro de Seguridad Marcelo Saín, y dejó una nota en la que reclamaba "medidas urgentes". La misiva llegó a la cartera santafesina, pero el mismo día en que este diario publicaba la nota correspondiente, el gobernador Omar Perotti le pedía la renuncia a Saín.
Por esos días, Ricci relacionaba el incremento de los delitos a la marginalidad que alcanza cada vez a más estratos de la sociedad, pero también a la disminución de la presencia policial en las calles. “Cuando comenzamos la gestión teníamos seis móviles del Comando Radioeléctrico, dos en cada una de las cuatro comisarías y cuatro de Gendarmería: 18 en total. Ahora, los de la fuerza nacional se van a Rosario, los efectivos hacen la ronda caminando. En las comisarías muchos móviles se fueron rompiendo o se destinaron a protección de civiles; recién ahora los estamos recuperando porque las custodias particulares se organizaron de otra manera. Y del Comando, nos quedaron tres, Y esto en una de 100 mil habitantes, con 29 asentamientos irregulares donde viven más de 20 mil personas”, manifestó en marzo de este año.
Claro está que para entonces la pandemia ya había complicado mucho más la ya crítica situación que se vive en la ciudad. Incluso, en agosto del año pasado el intendente había mostrado su inquietud y pedido mayor acompañamiento de las autoridades ministeriales.
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Pero este año, Villa Gobernador Gálvez se vio conmocionada el doble homicidio de los hermanos Procopp, ocurridos con apenas dos días de diferencia: el martes 23 de febrero Marcelo fue asesinado mientras se llevaba a cabo el sepelio de su hermano Javier Alejandro, de 36 años, quien había sido ultimado el domingo 21.
El crimen de Marcelo ocurrió en el cementerio de la ciudad, poco después de las 10.30, cuando familiares y amigos despedían los restos de Javier, y dos hombres irrumpieron en moto disparando.
Dos días antes, a las 20, Javier estaba parado en la puerta de su domicilio en Edison al 800, cuando también dos hombres en moto lo encararon y uno de ellos lo acribilló.
Es que, así como lo consignó este diario en marzo, la ciudad es escenario de un reacomodamiento de la narco criminalidad tras la salida de la escena del líder Ariel Carlos Jerry Gaeta, asesinado el 4 de agosto del año pasado, y de su archirrival Héctor Daniel N., conocido como “El gordo Dany”, quien fue apresado poco después.
A esto se sumaría la reaparición de gente vinculada a Leandro “Pollo” Vinardi, condenado en 2016 a 13 años de prisión por el crimen de Sergio Pared, ocurrido el 14 de febrero de 2013. Una vuelta al escenario delictivo con metodologías mafiosas, aprietes y extorsiones a carnicerías y supermercados.
La guerra narco, los ajustes de cuenta y la criminalidad vinculada a este negocio está dentro de las preocupaciones de las autoridades locales. Pero Ricci fue más allá al hablar de un mapa delictivo que abarca a todo el territorio y que se extiende en el tejido social, conforme aumenta la marginalidad.
En Villa Gobernador Gálvez funciona una Comisión de Apoyo a la Seguridad, que acompañó por entonces el pedido elevado por el intendente, junto con “120 instituciones, personalidades y vecinos de la ciudad”, le dijo Ricci a este diario.
