Bajo la consigna "volvamos a ser el jardín de la provincia" se desarrollará en Funes una movilización, organizada por vecinos autoconvocados en demanda de soluciones a los problemas que está generando en la ciudad la falta de prestaciones de servicios públicos básicos a causa de un conflicto laboral desatado en el municipio por incumplimientos salariales.
"Esta movida es en busca de respuesta a una situación apremiante", indicaron a LaCapital referentes del grupo que impulsó la convocatoria que tendrá lugar este jueves, a partir de las 19.30, en la Plaza San José.
El malestar social que se traducirá en protesta es el resultado de la difícil realidad financiera e institucional que atraviesa el gobierno local al no poder garantizar el pago de haberes, lo que desembocó en la puesta en marcha de un paro por tiempo indeterminado que fue anunciado la semana pasada.
Aunque lo sucedido se enmarca en un contexto de crisis que también afecta a otros municipios y comunas santafesinas, como ya dio cuenta este medio, tiene sus propias particularidades.
Si bien la medida de fuerza agrava el problema no es menos cierto que el nivel de atención municipal viene decayendo desde hace tiempo en diferentes áreas y la sociedad funense parece no estar dispuesta a seguir tolerando la debacle.
Así lo manifestaron vecinos consultados por este medio tras coincidir con que "es hora de decir basta porque el estado de desidia y abandono que presenta la ciudad no da para más".
Esa descripción es de fácil constatación al recorrer Funes y toparse con verdades postales de la dejadez que contrastan con la estética urbana de una ciudad históricamente caracterizada por su belleza. Contenedores abarrotados de basura y bolsas de residuos que cuelgan de cestos ubicados frente los domicilios no solo son indicadores de la desagradable fisonomía sino focos contaminantes que ponen en riesgo la salud de la población al atraer roedores y alimañas que pueden transmitir enfermedades.
Y en medio del caos algunos vecinos arrojan veneno para intentar contrarrestar la propagación de ratas, lo que constituye un peligro al punto que ya hubo animales que murieron al ingerir alimentos rescatados entre los desechos.
"Faltan servicios elementales como la recolección de residuos y el mantenimiento en general del municipio por problemas de pago a los empleados públicos, que ahora se declararon en paro por tiempo indeterminado. El dispensario no tiene insumos y estamos hartos, razón por la cual vamos a movilizamos", dijo Gastón, uno de los funenses que forma parte del grupo de vecinos autoconvocados.
También expresó su intranquilidad porque "tanta basura desparramada implica riesgos para la salud pública" al tiempo que apuntó que "tampoco se barre ni se cortan los yuyos mientras ninguna autoridad se haga cargo de la situación, lo que evidencia que hay un municipio acéfalo".
El hombre aseguró que "ya hace tiempo que Funes viene en un estado de decadencia y deterioro en materia de prestación de servicios, mantenimiento de calles y problemas de infraestructura, además de que hay sectores sin agua corriente y cloacas". Y en esa dirección afirmó que "en los últimos meses la situación se ve agravada porque el municipio no esta pagando a los proveedores y también se atrasa con los salarios, lo que ahora terminó en este paro por tiempo indeterminado". "Para colmo —añadió— en estos días llegó la tasa general de inmuebles (TGI) con un aumento promedio del 40 por ciento, la cual fue votada por los concejales a pesar de que el municipio no garantice los servicios, lo cual es una vergüenza que genera bronca e impotencia".
Desde el gremio municipal explicaron la decisión de llevar adelante un paro por tiempo indeterminado que surgió al no haber terminado de cobrar aún los sueldos de septiembre, al tiempo que también exigen el pago en término de los haberes del mes siguiente. No obstante advirtieron que, al margen de la medida de fuerza, los trabajadores tampoco cuentan con "materiales" suficientes para realizar normalmente las tareas de recolección y denunciaron que de seis camiones compactadores solo funciona la mitad.
En tanto el intendente de Funes, Diego Barreto, salió al cruce por medio de una comunicado donde si bien admite la crítica situación del municipio achaca que la medida de fuerza "no solo afecta a los vecinos sino a ellos mismos" ya que "saben que si no hay recaudación es imposible pagarles los sueldos y que sino brindan los servicios el vecino se ve perjudicado".
Barreto fue denunciado recientemente por el Concejo Municipal ante el Ministerio público de la Acusación para que investigue la posible comisión de delitos tipificados en el código penal al no responder a diferentes pedidos provenientes del órgano legislativo. La presentación fue impulsada por el presidente del cuerpo, Carlos Olmedo, quien explicó que "los concejales llegaron a esta determinación tras haber agotado todas las instancias administrativas, ya que no hemos recibido ningún tipo de respuestas a todos los pedidos de informes, decretos, citaciones y sobre todo, y lo que más nos preocupa, es la difícil situación económica que está atravesando el municipio".