Aunque aún no fue inaugurada, al fin se concretó la largamente esperada remodelación de un geriátrico casildense de Pami donde los abuelos ya pudieron regresar tras ser trasladados a otro espacio donde estuvieron más tiempo del previsto porque los trabajos se demoraron.
Ayer el lugar fue visitado por el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, en el marco de una recorrida que realizó en territorio santafesino con el precandidato a gobernador por Cambiemos, José Corral.
El atraso de esta obra, tal como dio cuenta La Capital, había generado una fuerte movida de la comunidad casildense para exigir su ejecución tras ser paralizada, lo que desembocó en un nuevo llamado a licitación del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados que allanó el camino para reactivarla y ser concluida.
A lo largo del derrotero que incluyó reclamos y gestiones al gobierno nacional anterior como al actual se suscitaron marchas y contramarchas donde no faltaron contrapuntos. La presión social y política para que se dé manos a la obra terminó dando sus frutos al convertir al Hogar de Ancianos Avelino Lottici en un sitio adecuado y confortable para los abuelos que no estuvieron ajenos al malestar que provocó en la ciudad ver por largo tiempo al lugar en total abandono y a merced del vandalismo.
La remodelación de la residencia situada a la vera de la ruta provincial 92, a kilómetros de la ciudad, fue adjudicada y llevada adelante por la empresa Compañía Central de Construcciones SRL que reactivó los trabajos que dejó trunco otra empresa para llevar adelante una serie de mejoras y ampliaciones.
Las tareas, que demandaron una inversión superior a las 8,5 millones de pesos, se reflejan en la belleza arquitectónica que muestra el edificio donde funciona el geriátrico que, hoy cuenta —aunque tiene capacidad para más residentes— con 10 abuelos que son cuidados y atendidos por personal capacitado.
Se hicieron ocho habitaciones, sanitarios y un área de expansión tipo pérgola para el personal, entre otras tareas del plan de ampliación del inmueble cuya superficie era de casi 476 metros cuadrados a los que se agregaron 96,5 de construcción cubierta y 49,68 semicubierta,
"Las habitaciones son de tres camas, los baños están bien equipados y también tenemos un espacio cómodo y muy lindo para comer además de poder disfrutar del hermoso parque que tiene este lugar y del resto de las instalaciones". Así lo describió, a La Capital uno de los residentes del refuncionalizado geriátrico casildense mientras tomaba unos mates sentado en un banco ante el amplio predio donde está la residencia a la que, al menos por ahora, no se permite ingreso al público por cuestiones de seguridad.
Frigerio al ser consultado sobre las tareas en el geriátrico dijo que "es una obra edilicia muy buena como otras que estamos haciendo en el Pami a lo largo y ancho de todo el país". Asimismo resaltó la importancia que significa para los ancianos contar con un espacio donde pueden "vivir con dignidad".