Pavón Arriba lanzó un programa de separación de residuos urbanos sólidos

La comunidad de Pavón Arriba lanzó un programa de separación y disposición final de residuos sólidos urbanos. El proyecto fue presentado por la vecina de esa localidad, Carina Musura, y un equipo conformado para llevar adelante el proyecto. Ya comenzaron con la recolección de botellas, tapitas y envases plásticos en esta primera etapa.

La localidad de Pavón Arriba tiene alrededor de 2.000 habitantes y genera tres camiones repletos de residuos sólidos urbanos por semana, lo cual significa 15.000 kilos de basura por semana. Unos 60.000 kilos por mes. Y 720.000 kilos de basura por año.

Una vez por semana, la comuna recolecta un carro de botellas plásticas, vidrio y cartón, lo cual significan aproximadamente 2.000 kilos por semana e implica 8.000 kilos por mes. Son 96.000 kilos por año. Y un promedio de seis camiones de residuos verdes (ramas, hojas, pasto, según la época del año que se trate) por día, lo cual significa también una importante cantidad de kilos por mes; y un volumen de basura inmenso.

Los residuos en Pavón Arriba tienen una disposición final fuera del distrito, a través de una empresa privada que cobra un canon cada vez que retira sus contenedores con basura. Cada batea tiene una capacidad de 30.000 kilos que llenan 2 camiones aproximadamente y pasan una vez por semana a retirarlas.

"Este estado de cosas nos invita a buscar nuevas soluciones a un problema tan complejo como el de la producción de residuos y su disposición final. Como comuna sabemos que cada tiempo histórico requiere una solución distinta, y por ello hemos iniciado este proceso junto a vecinos y empresas; y desde lo educativo, junto a las instituciones. Hoy la basura aún no es un problema en Pavón Arriba, pero tenemos que trabajar para que nunca llegue a serlo. Y para ello hay que comenzar ya", dijo el mandatario comunal Walter Bastianelli.

Y agregó que "ya comenzamos con la primera etapa de este nuevo esquema, que consiste en que se recolectarán envases plásticos, botellas y tapitas. Estas últimas van a tener un fin solidario. Nos comunicamos con una institución de la ciudad de Córdoba que está ayudando a dos niños que son electro-dependientes y necesitan mucha ayuda para poder seguir peleándole a la enfermedad".