Taxistas y remiseros casildenses denunciaron haber sido estafados por una mujer que abusó de su buena fe para apropiarse de dinero y a la vez convertirlos en destinatarios de créditos que nunca gestionaron y ahora se ven obligados a pagar.
Por Gustavo Orellano
Taxistas y remiseros casildenses denunciaron haber sido estafados por una mujer que abusó de su buena fe para apropiarse de dinero y a la vez convertirlos en destinatarios de créditos que nunca gestionaron y ahora se ven obligados a pagar.
Luego de ser trasladada desde Casilda a Rosario con la excusa de que tenía que viajar a un establecimiento hospitalario por un problema de salud, la embustera pasajera pedía a sus víctimas el número de una clave bancaria (CBU) para que la Aseguradora de Riesgo de Trabajo (ART) que, según afirmaba le cubría los gastos de su tratamiento médico, pudiera depositarles el pago del servicio de transporte.
Sin embargo, al chequear sus cuentas descubrían que el monto de la trasferencia superaba la suma acordada por lo que al ser advertida sobre la situación, la impostora apelaba al argumento de que esa diferencia le debía ser entregada a ella porque correspondía al importe que la ART había girado supuestamente para hacer frente a su prestación médica.
Claro que eso no hubiese configurado un engaño si no fuera porque la plata depositada no provenía de ninguna compañía aseguradora, como decía la mujer, sino de prestamistas que no tardaron en sorprender a los desprevenidos damnificados al contactarse para comunicarles que ya le habían otorgado y transferido el crédito que, en realidad, nunca solicitaron.
Allí descubrieron que habían sido víctimas de la argucia esgrimida por la mujer que aprovechándose de la confianza de sus víctimas montaba una mendaz historia para avanzar en su propósito de conseguir números de cuentas bancarios y datos personales que fueron claves para perpetrar la estafa.
El caso ya está siendo investigado por la Justicia a instancias de denuncias radicadas tanto en Casilda como en Rosario contra la presunta estafadora cuya identidad no trascendió aunque se supo que es casildense.
"Algunos ya hicimos la denuncia en sede policial pero seguramente hay muchos más damnificados y sería importante que aporten su testimonio y se sumen para ayudar a esclarecer lo sucedido y recaiga todo el peso de la ley sobre los responsables", dijo ayer a La Capital uno de los taxistas casildenses estafados.
Este hombre recordó que luego de trasladar a la mujer denunciada a un hospital de Rosario le envió a través de un mensaje de WhatsApp, pedido mediante, la clave de CBU de la cuenta sueldo y otros datos de su esposa que ahora aparece como destinataria de tres créditos de poco más de 4 mil pesos cada uno que no solicitó pero le fueron otorgados a través de una casa prestamista que tendría domicilio en Rafaela.
Una situación similar padeció una taxista que al igual que su colega prefirió mantener en reserva su nombre para evitar problemas. La única diferencia es que en este caso el depósito de dinero en su cuenta bancaria provino de una financiera que tiene fijado domicilio legal en la ciudad de Buenos Aires y a la que ahora se ve obligada a pagarle por el préstamo que nunca sacó.
"Esta mujer es una inescrupulosa que estafó a mucha gente y queremos que se investigue hasta las últimas consecuencias y se haga Justicia", indicaron los damnificados, al tiempo que insistieron con la necesidad de "alertar a la población sobre esta situación para que nadie más tenga que sufrir esta triste experiencia".
"Es importante —acotaron— que la gente sepa que si alguien le pide su CBU o datos personales para transferirle algún pago no lo haga sino está lo suficientemente seguro de que no va a resultar engañado como nos sucedió a nosotros que confiamos en esta persona y ahora nos encontramos con esta situación", explicaron.
Aunque las denuncias en Casilda, al menos hasta ahora, no fueron muchas, habrían resultado estafadas por medio de esta maniobra inescrupulosa alrededor de una decena de personas entre las que además de remiseros y taxistas también habría jubilados. A ello se suma las personas que también habrían sido víctimas en Rosario.
"Es probable que las causas se unifiquen", indicaron ayer a este cronista fuentes cercanas a la investigación aunque sin brindar mayores precisiones ya que se trata de una investigación que recién dio inicio.