En Rosario hay cuatro líneas de colectivos que directamente no prestan el
servicio nocturno y otras 15 que no cuentan con la cantidad de unidades mínimas exigidas en la
concesión. La situación fue revelada luego de cotejarse los horarios aprobados y publicados en
marzo pasado por el Ente del Transporte de Rosario (ETR) con las condiciones del pliego de la
licitación vigente. Como si esto fuera poco, las demoras continúan siendo un problema grave: de día
el 46 por ciento de las líneas no respeta las frecuencias estipuladas y en los servicios nocturnos
trepan al 75 por ciento.
El análisis fue realizado por el concejal justicialista Osvaldo Miatello quien
además integra el ente. "Como primera instancia, durante la próxima reunión de directorio se
solicitará que se expliquen las razones de esta situación: por qué se dio el visto bueno a horarios
que no respetan lo aprobado por el Concejo y el motivo de la falta de los servicios nocturnos",
adelantó el edil antes de señalar que, "de no obtener respuestas en ese espacio, se harán los
planteos correspondientes a través del Palacio Vasallo".
Para llevar a cabo el estudio se tomaron en cuenta los cuadros horarios de los
servicios que en marzo pasado publicó el propio ETR sobre 35 líneas de las 60 que operan en la
ciudad y se los comparó con los parámetros mínimos exigidos por la licitación pública nacional e
internacional para la concesión del servicio aprobada en 2004 y promulgada en 2005.
De noche, no. El incumplimiento de las frecuencias mínimas continúa siendo el
eje de las quejas de los vecinos. Sin embargo, en cuatro líneas directamente el servicio nocturno
no existe. Ese es el caso del 101 en sus banderas roja y negra que retiran los coches sobre la
medianoche y recién vuelven a funcionar a partir de las 4; mientras que la circulación del 107,
tanto en el servicio que va a Nuevo Alberdi como el que llega hasta Ibarlucea, también se suspende
sobre la medianoche hasta entrada la madrugada.
"Acá la gente está acostumbrada. Mal, pero acostumbrada", aseguró Adrián, un
vecino de Ibarlucea que señala que "en casos de emergencias y cuando los jóvenes quieren salir los
fines de semana no existe más opción que ir en auto. Y el no tiene, se queda sin alternativa".
Una situación similar plantean los vecinos de Nuevo Alberdi. Patricia Durán,
presidenta de la vecinal de la zona, señaló que "tanto el 102 rojo como el 107 en sus dos versiones
tienen dificultades de frecuencia en todos los horarios del día, aunque claro que esos problemas se
acentúan notoriamente durante la noche" cuando llega a haber e esperas de más de dos horas (por
ejemplo, respecto del 102 rojo).
Es más, como ambas líneas pertenecen a la firma Rosario Bus, del empresario
Agustín Bermúdez, Durán ironizó: "En este barrio vamos a donde Bermúdez quiere, cuando Bermúdez
quiere y como Bermúdez quiere. Así, llegamos a estar dos horas esperando un colectivo sobre el
inicio de la ruta 34, lo que de noche significa un robo seguro".
Para Miatello, la inexistencia de estos servicios nocturnos "no tiene
explicación lógica".
Menos colectivos. Otro dato que revela su informe es que 15 de las líneas
evaluadas cuentan con menos unidades que el mínimo exigido en el pliego. "Esto también afecta el
cumplimiento de las frecuencias, ya que también es bastante baja", indicó.
Si bien en el servicio nocturno el incumplimiento de las frecuencias alcanza al
75 por ciento de las líneas y sólo cinco respetan los horarios, durante el día hay mejoras , aunque
con ciertas falencias. Tanto es así que el 46 por ciento de los servicios diurnos tampoco cumple
con las esperas máximas permitidas.
"Muchas empresas comienzan a retirar las unidades de la calle cerca de las 20 y
quedan grandes baches entre las 21 y las 22 cuando todavía hay mucho movimiento de gente".
Amansadora
"A la línea de colectivos 139 se le exigía una frecuencia de entre 9 y 11
minutos, sin embargo los usuarios tienen que esperar 16 entre micro y micro, según se desprende de
los cuadros horarios publicados por el Ente del Transporte de Rosario", citó el edil Osvaldo
Miatello, a modo de ejemplo.