Marzo de 2020. La pandemia obligaba a un aislamiento obligatorio y estricto para evitar que se multiplicaran los contagios de Covid-19. El embate fue fuerte para todos los argentinos, pero tuvo un peso enorme en las mujeres en situación de violencia de género que de un día para el otro tuvieron que empezar a convivir en forma diaria y permanente con su agresor, muchas de ellas sin tener la chance de levantar un teléfono para pedir ayuda o asistir en forma presencial a los centros de salud, centros barriales o a la comisaría de la mujer.
Para darles respuestas y asistirlas en este contexto, la Municipalidad puso en aquel momento en marcha la Línea Violeta, que se sumó al conocido Teléfono Verde. El nuevo servicio permite dejar un breve mensaje por WhatsApp e incluso establecer en forma rápida un código con las operadoras en el caso de una emergencia.
La línea violeta (341-5-781509), que nació en pandemia, vio incrementada la demanda en un 123% en un año y claramente llegó para quedarse.
Es que la crisis del Covid trajo aparejado un aumento de los casos de violencia de género, con el agravante de que muchas víctimas (mujeres y personas LGTBIQ+ ) no podían solicitar asistencia. El Teléfono Verde sigue funcionando en el 0800-444-0420, ya que el WhatsApp lo hace de manera complementaria.
Mariana Alonso, directora de Prevención y Atención de las Violencias de Género de la Municipalidad de Rosario, dijo a La Capital: "Los momentos de mayor aislamiento en pandemia de Covid implicaron un gran desafío para los equipos ya que tuvimos que refuncionalizar muchos servicios”.
La funcionaria destacó: “Las mujeres estaban en sus casas, aisladas, y empezamos a notar que los llamados al Teléfono Verde bajaron de manera sorprendente y eso no era porque había menos problemas, sino todo lo contrario”.
Al advertir que las llamadas se desplomaban por la imposibilidad de muchas personas para pedir ayuda, se creó la línea violeta.
“De 500 llamadas en febrero 2020 al Teléfono Verde, antes de la pandemia, pasamos en marzo, en pleno aislamiento por el Covid, a un promedio de solo 20 llamados. Fue impactante”, señaló.
Pese a las dificultades por los protocolos vigentes, la dirección de Violencia de Género siguió funcionando como servicio esencial, pero era necesario ofrecer alternativas a las usuarias. “El Teléfono Verde estaba disponible y también los dos centros de protección con los que contamos”, comentó Alonso. "A esas opciones sumamos la Línea Violeta", resaltó.
"Esa vía de comunicación pasó de recibir 36 contactos en los primeros días de funcionamiento a 895 en marzo de 2021, un año después. Sin dudas era imprescindible contar con esto”, reflexionó la especialista.
Números que alarman
Otro dato significativo que dio la pauta clara de que había muchas más mujeres en problemas es que en marzo de 2020, en el aislamiento obligatorio, se registró el número más alto de ingresos de la historia del servicio a los centros de protección: 14 mujeres y 9 chicos en esas pocas semanas.
“Necesitábamos, por un lado, cuidar a las personas de los contagios en un momento en el que no se sabía mucho del virus, las noticias desde Europa eran abrumadoras y ni se podía pensar en la posibilidad de una vacuna, y por otro, asistir a las personas víctimas de violencia de género”, recordó la funcionaria. Por eso, “elaboramos protocolos para no dejar de cumplir con nuestra tarea y creamos más servicios. No solo sumamos la línea o contacto de WhatsApp que dio un gran resultado, sino también los Dispositivos de Atención Psicológica a Personas en Situaciones de Violencia de Género, con perspectiva de género”.
Estos dispositivos permiten una contención posterior a la denuncia, por ejemplo. Las personas víctimas de violencia pueden recibir asistencia tres o cuatro meses más a cargo de psicólogas para trabajar las secuela de la violencia de género. “Obviamente en los casos en los que se necesita otro tipo de apoyo se hacen las derivaciones correspondientes a otros sectores de Salud de la Municipalidad”, mencionó Alonso.
Este espacio de “escucha y acompañamiento” que comenzó de manera virtual sigue funcionando y se está trabajando en un sistema mixto de virtualidad y presencialidad, “con buenos resultados”. Ya pasaron por esta instancia 110 personas.
Las llamadas al Teléfono Verde a la línea violeta de WhatsApp corresponden a mujeres de todas las edades, desde la adolescencia hasta adultas mayores.
En 2021, entre ambas instancias de ayuda se recibieron 19.192 llamadas por violencia de género.