Martes 15 de Octubre de 2019
Las historias de los usurpadores de la pensión de San Martín 1665 no dejan de sorprender y vuelven a dejar en evidencia el mal accionar de la Secretaría de Desarrollo Social de la Municipalidad. Esa dependencia asistió en 2018 a una mujer en estado de vulnerabilidad a quien le habían usurpado su casa en la zona sur y había quedado en la calle.
El municipio le otorgó un subsidio para que pudiera alquilar y ella recaló en la pensión usurpada. Allí vivía sin luz, sin agua y junto a personas con frondosos antecedentes penales que, al parecer, ningún asistente social percibió.
Pero lo más curioso es que el viernes pasado fue detenido en esa pensión un hombre a quien ella había denunciado en dos oportunidades por violencia de género. Es decir, el municipio tampoco chequeó que la víctima a la que asiste vivía bajo el mismo techo que su victimario.