Aborto legal, educación sexual integral, paridad de género y equidad laboral fueron las exigencias más repetidas en la masiva marcha que ayer recorrió el centro de la ciudad para conmemorar el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. En lo que va del año, en la provincia fueron asesinadas 16 mujeres, según datos de la Subsecretaría de Políticas de Género de la provincia. Seis de cada diez víctimas tenían entre 18 y 30 años.
Por eso, la consigna "Vivas nos queremos" se multiplicó ayer en los letreros, banderas, remeras y cantos de la movilización que partió a las 16.30 de la plaza San Martín. Una marcha que cubrió unas nueve cuadras, desde la organización se calculó una convocatoria de unas 10 mil personas, donde las mujeres fueron indiscutidas protagonistas.
Mujeres caminando detrás de banderas de organizaciones de mujeres, de organizaciones sociales, de partidos políticos, de entidades profesionales, de centros de estudiantes. Jóvenes con coronas de flores y glitter en las mejillas, chicas empujando cochecitos de bebé, docentes, legisladoras, desocupadas, profesionales. Un movimiento tan diverso como el feminismo.
Las consignas que levantaban recordaban los nombres de las víctimas de femicidio en la región, reclamaban la emergencia nacional en violencia de género, advertían que "el ajuste del pueblo es violencia" y exigían "aborto legal ya" o "separación de Iglesia y Estado".
El parque nacional a la Bandera fue el punto de encuentro de todas esas mujeres que caminaron desde la plaza San Martín. En ese espacio junto al río, reunidas en ronda, sin escenario ni oradores, las organizadoras repartieron el documento de dos carillas que fue leído al unísono por las participantes de la marcha.
Un domingo particular
La gran cantidad de mujeres que sobre las cinco empezó a llegar al parque al pie del Monumento a la Bandera cambió la tradicional postal de un domingo soleado en el histórico espacio verde.
Sentadas en rondas de mate en el pasto, coreando canciones que pronosticaban el fin del patriarcado y afirmaban que "nos tienen miedo porque no tenemos miedo", las mujeres habían tomado el parque. Por si hiciera falta aclararlo, un grupo de chicas exhibía un cartel que decía: "Disculpen las molestias, nos están matando. Vivas nos queremos".
El Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres fue designado por las Naciones Unidas como una jornada para denunciar los actos de violencia basados en el género que tienen como resultado un daño físico, sexual o psicológico. La fecha elegida conmemora el asesinato de Patricia, Minerva y María Teresa Mirabal, fervientes opositoras a la dictadura de Rafael Trujillo en Honduras, asesinadas el 25 de noviembre de 1960 por agentes del Servicio de Inteligencia Militar.
El primer punto del documento consensuado entre las organizaciones que convocaron a la marcha repudió "el avance de los gobiernos de derecha en la región y el avance del fascismo y los fundamentalismos religiosos en Latinoamérica".
En medio de una tarde tranquila, el parque se llenó de voces de mujeres que reclamaron por la violencia que las convierte en víctimas. Y pidieron que la Legislatura vuelva a debatir el proyecto de aborto legal, seguro y gratuito, que rechazó el Senado en agosto pasado, y que se cumplan con los protocolos de interrupción legal del embarazo en los casos previstos en el Código Penal.
Además, se exigió que los senadores santafesinos aprueben la ley provincial de educación sexual integral, que permitirá resguardar el derecho de todos los estudiantes de la provincia a recibir información científica sobre sexualidad. Y rechazaron la injerencia de las Iglesias en el diseño e implementación de políticas públicas.
Con un aplauso, se reclamó paridad de género en todos los ámbitos de representación y la aprobación de la ley de paridad de género y contra la violencia y discriminación laboral, el pago de igual salario por igual trabajo y la reapertura de paritarias.
Y también formación obligatoria en derechos humanos, diversidad sexual, igualdad y violencia de género para los operadores del Poder Judicial provincial.
Las cifras frías
Según el Observatorio Adriana Marisel Zambrano, en el país hay un femicidio cada 32 horas. Ayer se advirtió que en lo que va de 2018 fueron asesinadas por razones de género 245 mujeres y seis personas trans, mientras otras 67 personas trans murieron por el abandono del Estado.
En la provincia, de acuerdo a datos de la Subsecretaría de Políticas de Género, 16 mujeres fueron asesinadas en lo que va del año. El 62 por ciento tenía entre 18 y 35 años.
En el 89 por ciento de los casos de homicidio, los acusados por el asesinato fueron varones. En 6 situaciones, el acusado del femicidio es la pareja conviviente de la víctima y en otros 4 casos se trata de la ex pareja.
C. B.