Solicitan extremar las precauciones sanitarias ante la crecida

La Secretaría de Salud Pública municipal exhortó a extremar precauciones frente a la crecida del Paraná para prevenir enfermedades, picaduras de alacranes y escorpiones, y mordeduras de serpientes.

Ante la creciente del río y el aumento de las situaciones de riesgo que este hecho conlleva, la Secretaría de Salud Pública realizó diversas recomendaciones para prevenir enfermedades y dolencias causadas por infecciones y picaduras de insectos u otros animales.

Para prevenir picaduras de alacranes se debe tener especial cuidado cuando se examinen lugares oscuros y húmedos en los domicilios o debajo de cortezas de árboles, piedras, ladrillos u otros sitios. También es necesario evitar caminar descalzo en zonas donde exista la probabilidad de su presencia. Esto es especialmente importante cuando se trata de niños.

Por otro lado, para protección del hogar se deben utilizar rejillas de trama adecuada (pequeña) en desagües de ambientes y de sanitarios (bañaderas, piletas). En puertas y ventanas puede utilizarse alambre tejido.

Las medidas de orden general para el correcto manejo de los accidentes por alacranes y escorpiones consisten en: mantener la calma; aplicar compresas frías o hielo en la zona de la picadura para calmar el dolor y producir vasoconstricción, demorando la propagación del veneno, además de asistir inmediatamente a un efector de salud. Se debe evitar apretar o perforar el área de la picadura, quemar o aplicar soluciones sobre la misma o intentar retirar el veneno con la boca.

En el caso de estar ante una situación de riesgo con una serpiente se recomienda mantener la calma y alejarse del lugar. El animal siempre va a tratar de huir, pero, en el caso de sufrir el ataque, concurrir lo más rápido posible a un centro de atención médica.

Es necesario saber que el antiveneno o suero antiofídico es el único tratamiento efectivo para la mordedura de una serpiente venenosa y que debe ser aplicado por un médico.

En la provincia de Santa Fe habitan cuatro especies conocidas de ofidios que son consideradas de potencial riesgo para la salud humana: víbora de la cruz o yarará grande, yarará chica, cascabel y coral. Si bien son peligrosas, también ejercen un eficiente control de las poblaciones de roedores, por lo que no es recomendable matarlas.

Vacunas e higiene. Las inundaciones y las aguas permanentes suponen diversos peligros, entre los que destacan enfermedades infecciosas, dermatitis, enfermedades respiratorias y traumatismos. Por eso, es fundamental, frente a la aparición de síntomas como fiebre, diarrea, dolores musculares y accidentes, que se realice una consulta precoz con un profesional.

Asimismo, y para la prevención de este tipo de cuadros, es muy importante sostener las siguientes pautas relacionadas con la higiene y la alimentación: lavarse frecuentemente las manos, mantener la lactancia materna, disponer la basura en recipientes bien protegidos y utilizar agua segura.

Agua. En caso de no saber si el agua está en esas condiciones, es posible potabilizarla agregando dos gotas de lavandina concentrada por litro (tapar el recipiente y dejar reposar 30 minutos antes de usarla) o hirviéndola entre 2 y 3 minutos (enfriar sin destapar el recipiente y siempre lavar con agua segura todos los contenedores).

Asimismo, se solicita prestar especial atención a la prevención del tétanos, que se contrae a partir de la infección de heridas abiertas, para lo cual es vital tener al día el calendario de vacunación. En caso de haber recibido la última dosis de la vacuna contra esta dolencia hace más de 10 años, se sugiere aplicar un refuerzo.