Las balaceras, los episodios de violencia y las denuncias cruzadas continúan repitiéndose alrededor del Sindicato de Peones de Taxis de Rosario. Estos tensos enfrentamientos recalientan cada vez más la interna dentro de este gremio, que no encuentra calma desde hace meses. Ayer, el actual secretario general, Horacio Yannotti, denunció que en la noche del miércoles hubo dos tiroteos, uno destinado a la vivienda de un dirigente y otro a la casa del hijo de esta persona, zona oeste de la ciudad. En ambos casos, las balas terminaron en construcciones cercanas.
Ante este escenario, Yannotti responsabilizó directamente a Horacio Boix, el ex conductor del gremio, que fue denunciado por la actual dirigencia ante la Justicia por malversación de fondos del sindicato.
Frente a esas acusaciones, Boix rechazó su vinculación con los episodios de violencia, y a la vez prometió que va a volver al sindicato, una vez que la Justicia ordene su restitución. "Yo soy inocente hasta que la Justicia diga lo contrario. Por eso, iré a ocupar mi cargo", resaltó Boix.
Las últimas balaceras denunciadas por los directivos actuales se registraron en la noche del miércoles en el domicilio particular de un taxista vinculado al gremio, ubicado en Cochabamba al 4800, y en la vivienda del hijo de ese hombre, en Pascual Rosas al 1800. Pero según el reporte policial, hubo errores en la planificación de esos ataques ya que fueron viviendas aledañas las que sufrieron los tiroteos. Por suerte, ninguno causó heridos de gravedad.
Más allá de eso, desde la dirigencia actual del gremio denuncian que viven en un estado permanente de intranquilidad, tanto a nivel familiar como laboral.
Vale recordar que ya son seis hechos de violencia relacionados con los enfrentamientos y las disputas internas entre taxistas que estallaron tras la denuncia contra Boix. Esa presentación judicial, impulsada por Yannotti derivó poco después en una asamblea que resolvió expulsar a Boix del sindicato.
Ante este agitado panorama, Yannotti acusó sin rodeos a Boix de ser el instigador de los ataques. En ese sentido, adjudicó esos hechos a un sector interno que responde al destituido Boix.
"Estamos con el firme propósito de levantar un sindicato que estuvo muy mal conducido por Boix. Lo hemos denunciamos penalmente. Esto no es una interna gremial. Es un problema penal. La comisión directiva en pleno lo ha denunciado a Boix por malversación de fondos", destacó Yannotti, quien no dudó en criticar a la Justicia.
"La Justicia tiene sus tiempos. Lo entendemos. Pero la causa no ha avanzado y estos personajes (por Boix y sus seguidores) actúan en consecuencia y no permiten que la comisión directiva siga funcionando", advirtió Yannotti.
Asimismo, recordó que Boix "no puede volver al sindicato porque fue echado por una asamblea. Ahora quiere embarrar la cancha. Ya hicimos las denuncias, pero no sabemos por qué Fiscalía ni siquiera lo llamó a declarar. Esto superó todos los límites. Por eso pedimos una entrevista con Jorge Baclini, jefe de los fiscales de Santa Fe".
Por su parte, Boix rechazó de manera pública todas las acusaciones y, además, prometió que volverá a ocupar el cargo máximo en la institución de Salta al 2800. "Niego rotundamente mi responsabilidad en todos esos hechos. No tengo absolutamente nada que ver. Sospecho que son ellos mismos. Se balean las casas para responsabilizarme a mí y degradar mi imagen", manifestó el ex secretario, quien además aseguró que iniciará una acción judicial contra Yannotti por las acusaciones en su contra.