El sofocante calor, las lluvias, y la alta demanda energética continúan generando cortes de suministro eléctrico en diferentes áreas de la ciudad que desembocaron en airados reclamos a través de los medios de comunicación y las redes sociales. Algunos programados, otros fuera de los anuncios oficiales, y con un enorme apagón que sufrió por la tarde el macrocentro con más de 5 mil usuarios afectados, lo cierto es que la jornada de ayer evidenció numerosos inconvenientes entre los rosarinos. En este contexto, las quejas de los clientes se multiplicaron, y se prevé que este escenario continúe en los próximos días si se mantienen las condiciones climáticas.
En las últimas 24 horas, tres cables de distribución de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) salieron de funcionamiento, por lo que varias cuadrillas estuvieron abocadas a restablecer el servicio en las zonas afectadas, que en ese momento, de acuerdo al cálculo que expresó la vocera de la empresa Diana Antruejo, representaba "alrededor del 2 por ciento de los clientes".
En este marco, se hizo hincapié en que "todo el recurso humano" se movilizó a esas áreas para poder ir normalizando los siniestros, tanto de baja como de media tensión.
Por la mañana, que combinó altas temperaturas y abundantes lluvias, Antruejo señaló que "de 400 cables distribuidores que tiene la empresa, hay 3 fuera de servicio que corresponden de 24 de Septiembre a Ayolas y 1º de Mayo a Esmeralda; el otro radio es de Callao a Francia y de Ocampo a Rueda; y el restante es Pampa, Solís y Colombia".
También por la tarde hubo cortes por mantenimiento en una subestación en tres zonas: Tucumán, avenida Francia, Urquiza y Crespo; Urquiza, Vera Mujica, Santa Fe e Iriondo; y en Santa Fe, Suipacha, Rioja y Crespo.
Se trabajó sobre estos desperfectos hasta la noche.
En tanto, la vocera precisó que "los problemas en baja tensión fueron por la saturación de los cables, hay cables quemados, cortados, o falla de alguna fase".
Más allá de este esfuerzo que manifestó la empresa, muchos vecinos ofuscados expusieron toda su bronca por la situación que tuvieron que atravesar. Como Cristina, una jubilada que vive en las torres ubicadas en Cochabamba y Necochea. Ella denunció que en ese lugar el corte se inició el lunes, a las 15.30, y hasta ayer a la noche no contaban con suministro eléctrico. Ese incidente dejó sin agua y sin ascensor a un edificio que alberga a más de 80 familias, con muchos ancianos y niños.
El reclamo de Cristina se multiplicó en muchas otras zonas de la ciudad, algunas dentro del marco de los anuncios de la EPE, y otras fuera de toda posibilidad de prevenir esta situación realmente incómoda.
En el macrocentro. En tanto, por la tarde, con muy poco tiempo de aviso previo, se procedió a un gran corte en la red de media tensión, que arrancó alrededor de las 17.30 y se extendió hasta la noche, en un amplio sector del macrocentro comprendido por calles San Lorenzo, Italia, 27 de Febrero y Río de Janeiro, que afectó a 5 mil usuarios.
Esa operación en la red se debió a la reparación de un cable de distribuidor ubicado en un ducto por el que pasan varios cables; según la EPE, "a efectos de resguardar la seguridad de clientes y del personal técnico".
Este corte de magnitud se dio en el horario de regreso de los rosarinos a sus hogares luego de la jornada laboral, lo que ocasionó bastantes inconvenientes.
Con este panorama, desde la EPE destacan la necesidad de contar con la colaboración de los ciudadanos a través de un cuidado responsable del consumo energético.
"Hay que extremar cuidados con la utilización de la electricidad. Todos los sistemas se están exigiendo de una manera importante para que el servicio eléctrico llegue de la mejor manera posible a los hogares de los rosarinos. Debe haber un uso responsable y eficiente de la misma", remarcó Antruejo.
