"Hoy puede ser un día memorable para todos los argentinos si la Ley se aprueba. En el país, unas 400 mil personas tienen hepatitis C y solo el 30% lo sabe, y este es uno de los tantos motivos que tenemos para estar expectante por la decisión que se tome", dijo Edith Michelotti, titular del grupo Hepatitis Rosario, una de las organizaciones pioneras en la lucha por los derechos vinculados a la salud.
Desde las 13, legisladores nacionales están reunidos este jueves y comenzaron a tratar los temas establecidos para esta jornada, entre los que se encuentra, justamente, el proyecto de ley nacional de respuesta integral a las hepatitis virales, el VIH, otras infecciones de transmisión sexual (ITS) y la tuberculosis.
Existe una ley vigente, desde 1991, “que requiere una actualización indispensable”, según señalan desde distintas entidades que nuclean a pacientes y familiares y que desde temprano esperan con ansiedad en las afueras del Congreso. Un nutrido grupo de rosarinos y gente de poblaciones cercanas está participando activamente de esta jornada.
El proyecto, además de garantizar el diagnóstico oportuno, el acceso igualitario a todas las terapias vigentes y eficaces, tiene también un peso relevante en cuanto a que apunta a erradicar prácticas discriminatorias, tan frecuentes para quienes conviven con este tipo de situaciones. Establece, entre otras pautas, la prohibición definitiva de la prueba del VIH y otras enfermedades (ITS) como parte de los exámenes preocupacionales.
Promueve el impulso a la producción pública de medicamentos e insumos y la participación activa de las personas con diagnóstico positivo en el diseño de políticas, así como la posibilidad de jubilarse anticipadamente o de acceder a una pensión no contributiva de carácter vitalicio en caso de situación de vulnerabilidad social.
Del silencio a la visibilidad
“Hace poco, al sesionar Diputados se dio media sanción. Solo 8 legisladores votaron en contra. Nunca pudimos entender por qué, ya que es una ley por la salud y la vida de todos los argentinos en lo que respecta a esas cuatro enfermedades, que son verdaderos flagelos mundiales”, comentó Michelotti.
“Estamos atentos a lo que está pasando en el Congreso y confiamos en que será un día para celebrar esta Ley”, agregó.
Las hepatitis, el VIH Sida, la tuberculosis y las infecciones de transmisión sexual, como tantas otras, “quedaron en pausa durante la pandemia y después de dos años de estar dedicados a combatir y controlar el Covid es hora de que nos fijemos con enorme atención en todo lo que hace a la salud de una persona”, reflexionó la referente rosarina.
Respecto de las hepatitis, Michelotti recordó que en la mayoría de los casos los síntomas no aparecen hasta que la enfermedad está muy avanzada y las consecuencias ya suelen ser difíciles de revertir.
“Pedimos a la población que se vacunen contra la hepatitis B para la que tenemos ese recurso tan valioso, que vayan a controlarse y hacerse el análisis correspondiente para conocer si tienen alguna de estas infecciones virales que pueden afectar el hígado hasta llevarlo a una situación como la cirrosis y el cáncer. La Ley facilitará y alentará estas acciones”, puntualizó.
“Estamos, como dije, en un día importante para visibilizar estos temas, para que haya igualdad de oportunidades en el acceso a la salud. Por la vida de todos los argentinos, que sea Ley”, exclamó Michelotti.