La familia Roccuzzo criticó con dureza la decisión judicial de indemnizar a una ex empleada por acoso laboral. Uno de los abogados de la cadena de supermercados del padre de la esposa de Lionel Messi dijo que la mujer se aprovechó de ese partentesco para "obtener una ventaja económica".
La firma de Pascual José Rocuzzo, el suegro de Lionel Messi, fue condenada el lunes a pagar dos millones de pesos a la ex empleada, quien trabajó durante 20 años en el local de Lavalle 2500. No obstante, el letrado Daniel Botello dio a conocer que el fallo dictado por la jueza Susana Perkins fue apelado, a la vez que lo consideró "arbitrario, injusto y tendencioso".
Botello advirtió que "la demandante se ha fundado en el parentesco de uno de los titulares de la firma con Lionel Messi y aprovechó esta situación para darle imagen pública a esta cuestión". En este sentido, añadió: "Seguramente que si la empresa era de Juan Pérez, no habría tenido tal repercusión".
El patrocinante de la ex empleada, Bernardo Larroux, había detallado que Roccuzzo "no obró de buena fe". Y abundó sobre el litigio que comenzó en 2014, a partir de que la mujer se diera por despedida "por diversos hechos desde la patronal tendientes a descalificarla, cambios de horarios y maltrato con la finalidad de forzarla a una renuncia".
No obstante, en diálogo con La Ocho, Botello afirmó que las condiciones de trabajo no eran desfavorables. "La sentencia es arbitraria e injusta, e inclina la balanza de manera artificial a favor de la empleada y no por lo que hay en el expediente. En lugar de seguir trabajando en la empresa, no sé si por consejo de terceros, o por decisión propia, optó por tener una ventaja económica".
Por otro lado, sumó: "En realidad el cambio de tarea que se dispuso fue en beneficio de la trabajadora, con reducción de horario, conservando la misma remuneración, incorporándose a una tarea de responsabilidad que tenía que desempeñar al lado de uno de los titulares de la empresa".
Asimismo, reveló que "todo fue confirmado por los testigos y quedó registrado en el expediente", y añadió que la jueza se basó para dictar sentencia en otro testimonio y "desechó unos seis relatos favorables a la empresa demandada".
La empresa de Roccuzzo fue condenada a pagarle dos millones de pesos a la demandante, quien hizo una denuncia por maltrato laboral. La empleada cumplió tareas durante dos décadas en la firma de supermercados que conduce el suegro del futbolista.