Prestadores de salud del interior denuncian que puede "sucumbir" la actividad

En esta etapa de máximas exigencias sanitarias debido a la pandemia por el coronavirus, la Asociación de Prestadores de Salud del interior del país denunció, a través de un comunicado, que la mayoría de los financiadores del sector “no han actuado con la solidaridad que el momento requería, ni han ajustado los aranceles como habían prometido, lo que nos hubiera permitido seguir cumpliendo nuestro rol esencial en plena pandemia”.

El envío cuestionó las acciones que llevaron adelante “Pami, obras sociales provinciales, nacionales, sindicales, y empresas de medicina prepagas”, y precisó “en especial estas últimas”.

Estos referentes de salud del interior del país subrayaron que “no todos nos entendieron y acompañaron con la responsabilidad que la situación requería”.

Los prestadores remarcaron que “el trabajo desplegado fue arduo y la comunidad nos aplaudió cuando nos necesitó”. Pero advirtieron que “ahora, de no mediar una modificación en el financiamiento o un incremento en los aranceles compensatorios, sucumbirá la actividad prestadora en el interior del país, lo que ocasionará graves y tristes consecuencias para la población”.

El importante escrito resaltó que el sector está haciendo “un enorme esfuerzo físico, profesional y económico para poder sobrellevar la atención de la salud ante esta pandemia, y demás patologías en general, como quedó evidenciado con los resultados sanitarios obtenidos”.

En ese sentido, admitieron que “el Estado nacional y provincial colaboró con recursos para el pago de sueldos al personal, la rebaja transitoria de impuestos y otras ayudas muy importantes”.

“Mantuvimos las puertas abiertas y toda nuestra capacidad prestacional estuvo a disposición de la comunidad, de manera coordinada con el sector público, a pesar de la brutal caída de nuestros recursos y el incremento desmesurado del costo sanitario que superó cualquier índice de medición”, enfatizó el comunicado.

Salud Federal

Para afrontar esta “alarmante realidad”, constituyeron Salud Federal, una asociación conformada por los principales prestadores sanatoriales del interior del país, con el firme objetivo de “defender nuestra subsistencia y hacer oír nuestra voz urgentemente, junto a las organizaciones y cámaras gremiales empresarias existentes que nos apoyan”.

Los prestadores expusieron las severas complicaciones que atraviesan. “En este momento el Estado anuncia y se dispone a ejecutar la próxima finalización de los ATP; las empresas de medicina prepaga se niegan a cumplir con los acuerdos arancelarios pactados, y las obras sociales y el Pami son renuentes a otorgar mecanismos de incrementos, los que ya han sido reclamados y resultan absolutamente imprescindibles”.

Estos representantes del sector destacaron que “el virus persiste en su agresividad y, tal como viene ocurriendo en el hemisferio norte, las segundas y terceras olas de contagios son más intensas y están en el horizonte cercano, por lo que constituyen amenazas concretas que requieren alertas y previsiones inmediatas para contenerlas”.

El comunicado graficó la preocupante situación: “Los prestadores privados atendemos al 70 por ciento de la salud en el interior del país”.

Y aseguraron que eso se produce “sin ayuda estatal, salvo la provocada por la pandemia; con aumentos constantes de los costos (salariales, medicamentos, insumos, servicios, y tarifas) en porcentajes que superan cualquier índice usual; con una caída vertical del flujo de pacientes no Covid; manteniéndonos en funcionamiento la totalidad de las entidades; con aranceles atrasados y sin compensatorios de los costos, y el mantenimiento de un sistema de módulos imposible de sostener por la ostensible desactualización del valor de todos sus componentes”.

La intención del comunicado fue visibilizar este grave problema en el área. “Deben tomar conciencia de la gravedad del momento, y tienen que adoptar inmediatamente las medidas que estamos reclamando”.

El pedido también se dirigió “a las autoridades estatales de todos los niveles y jerarquías, tanto nacionales como provinciales, para que adopten las acciones que estamos propiciando, antes de que sea demasiado tarde”. Y desde la asociación remarcaron que “en este momento crítico está en riesgo la salud del 70 por ciento de la población del país”.