El golpeado sistema de transporte público de pasajeros local viene evidenciando serios problemas. A los altos costos de los insumos, como repuestos y cubiertas, entre otros, se suma la caída de los pasajeros transportados.
El golpeado sistema de transporte público de pasajeros local viene evidenciando serios problemas. A los altos costos de los insumos, como repuestos y cubiertas, entre otros, se suma la caída de los pasajeros transportados.
En efecto, a medidos de mes, un informe del Observatorio Social del Transporte había advertido una caída interanual del 11 por ciento en la cantidad de usuarios.
El estudio también había hecho una comparación con lo que sucedía en 2015, cuando la cantidad de viajes realizados a bordo de los colectivos rosarinos fue de algo más de 139 millones y cayó a 104 millones en este 2019. Es decir, uno de cada cuatro usuarios dejó de subirse a los ómnibus rosarinos a lo largo de ese período de tiempo.
En un intento por contrarestar la crisis del sistema, la Municipalidad aumentó cuatro veces en un año el precio del boleto, totalizando un incremento del 40 por ciento. Así las cosas, el pasaje trepó a 32,50 pesos, algo menos de cuatro pesos por debajo de los 36,11 pesos que arrojó el costo real del pasaje en el último estudio de costos.
Resta ver ahora cómo impactarán estos fondos extra que Nación girará ahora de aquí a fin de año.
Por María Laura Neffen
Por María Laura Favarel